En Xalapa existen 450 niños trabajadores en riesgo de abandonar su hogar, por violencia familiar

La organización Movimiento de apoyo a los niños trabajadores y de la calle, (MATRACA), atiende sus derechos, da apoyo, atención a niñas, niños y adolescentes, que trabajan.

Zona Centro

Nicolás Cruz Hernández - 2024-04-13

Este 12 de abril al conmemorarse el día Internacional de Niños en situación de calle, en Xalapa, existen 450 niños trabajadores que viven en situación de calle, en Xalapa, la organización Movimiento de apoyo a los niños trabajadores y de la calle, (MATRACA), atiende sus derechos, da apoyo, atención a niñas, niños y adolescentes, que trabajan.


En entrevista la directora de Matraca Erika Antonio Blanco, dijo que actualmente en la capital del Estado no tienen ningún niño que se encuentre totalmente en situación de calle, hay niños que se encuentran en riesgo de abandonar su hogar en situación de calle por algún tipo de violencia familiar, de salud, educación y vivienda y en riesgo de abandonar su hogar.


Las niñas y niños que se encuentran trabajando en la calle son de los 5 hasta los 18 años cuentan con el apoyo de pediatras, ginecólogos, médicos para lo que puedan necesitar como estudios de sangre y radiografías, por no contar con un seguro médico.


Explicó que a los niños que están en riesgo de abandonar su hogar los apoyan para encontrar a su familia cercana que los pueda acoger y puedan cubrir todos sus derechos., indicó que el fenómeno del niño trabajador se ha movido a cruceros de semáforos y mercados.


Indicó que el club MATRACA, ubicado en Insurgentes # 58 da servicio de educación, primaria, secundaria y bachillerato a través de una beca que les da Consorcio Clavijero y también un platillo de alimentación saludable a los niños que asisten. Actualmente atienden a 30 niñas, niños y adolescentes trabajadores de la calle.


No sólo se da en las instalaciones de Matraca, también en seis colonias de la periferia de Xalapa, el Moral, Miguel Aleman, Luis Donaldo Colosio, Plan de Ayala y Niños Héroes, con talleres de prevención de la violencia, prevención de consumo de sustancias nocivas, teatro, de arte, para aprender otros oficios. Con madres y padres, con talleres productivos, como bordado, pintura en tela. Para que puedan vender y ampliar sus posibilidades económicas.