* Cuando escapaba sus captores le dispararon y Luego huyeron en dos camionetas.
Policiaca
Guillermo Gutiérrez Arias - 2011-10-28
Integrantes de la delincuencia organizada asesinaron a un joven que presuntamente tenían secuestrado en una casa de seguridad en la calle 30 de la colonia El Naranjito de éste Municipio, lo que movilizó a los cuerpos de seguridad y elementos del Ejército mexicano, además de causar el temor entre los vecinos.
Los hechos sangrientos se registraron la tarde de ayer en la colonia El Naranjito, cuando se presume que el joven logró abandonar la casa de seguridad y pedir auxilio, pero dos de los delincuentes lo alcanzaron y casi a quemarropa le hicieron por lo menos 4 disparos, cayendo mortalmente herido en la banqueta de la calle 30.
Según testimonios de los vecinos, nunca se imaginaron que fueran disparos los que se escucharon, debido a que el día de ayer se celebraba el Día de San Judas Tadeo y pensaron que fueron cohetes los 4 cuatro estruendos que se escucharon.
El cuerpo del joven que vestía una camiseta blanca quedó boca abajo en medio de un gran charco de sangre, mientras que una llamada anónima alertó a la policía intermunicipal con base en Cosoleacaque, quien de inmediato se trasladó al lugar.
De igual manera, según versiones, los delincuentes una vez que asesinaron al joven, presuntamente secuestrado huyeron a gran velocidad a bordo de dos camionetas, sin que se pueda precisar las características. Mientras que el cuerpo fue levantado de inmediato por periciales sin el levantamiento técnico que requiere estos casos, con la finalidad de evitar a los medios informativos.
Al lugar llegó el Coordinador de la Policía Intermunicipal CMCN Carlos Gallegos Curiel, el Subinspector en Cosoleacaque, Gumersindo, elementos de la policía ministerial, la agente del ministerio público Patricia Zamudio Coria y personal de servicios periciales, quienes de manera prepotente “gritaban que no querían la presencia de la prensa”.
De la casa de seguridad, que por cierto por información de los vecinos perteneció a Clemente Gómez Duvel y en ella estuvo viviendo su esposa y que estuvo vacía hasta hace unas dos semanas, las autoridades de servicios periciales sacaron por lo menos dos tablas de castigo que utilizan los delincuentes para torturar a sus víctimas, tres armas largas, una bolsa con ropa y otros objetos.
En la cochera que es cubierta por dos árboles frondosos se encuentra una camioneta de color gris X-Trail. Luego de casi una hora los elementos de la policía estatal se retiraron del lugar, al igual que la policía intermunicipal y ministerial.
El área de la casa fue acordonada por elementos del ejército mexicano quienes se hicieron cargo de la situación, mientras que la Agente del Ministerio Público, personal de servicios periciales y algunos miembros de las fuerzas armadas, estuvieron más de tres horas en el interior de la casa de dos plantas, con teja en el techo y de color rosado.
Hasta las 18 horas ninguna autoridad había proporcionado oficialmente información acerca de los hechos. Sin embargo, versiones de los vecinos a la casa llegaban por lo menos tres hombres y tres mujeres en diferentes vehículos lujosos, pero nunca se les pudieron ver el rostro.
