Alza en las tortillas ejerce presiones sobre México

El precio de las tortillas, un alimento básico en México, hizo dudar a Enrique Peña Nieto cuando un entrevistador se lo preguntó en el periodo previo a las elecciones de 2012 y no lo sabía. Ahora la tarea más urgente del Presidente es garantizar que el costo de las tortillas y de otros productos básicos no se dispare.

La inflación, impulsada por la aparentemente imparable caída del valor del peso en su paridad con el dólar, ya se aceleraba de mínimos históricos a un máximo en dos años incluso antes de que el gobierno iniciara el nuevo año con un incremento de 20 por ciento en los precios de los combustibles. Con temores de que la agenda proteccionista de Trump cause estragos en la economía mexicana, la penumbra se profundiza. Si el costo de los pilares de la dieta mexicana como las tortillas, los huevos, la leche y el pollo comienzan a dispararse, un gobierno ya de por sí impopular puede esperar una serie de protestas en un país donde casi la mitad de la población vive en la pobreza.

Hermenegildo Jiménez, quien produce tortillas en una pequeña tienda en un vecindario de clase trabajadora en México, calcula que tendrá que aumentar el precio de un kilo a 14 pesos, en comparación con el nivel actual de 12 pesos, tan pronto como esta semana; un increíble incremento de 17 por ciento para los discos de maíz que los mexicanos enrollan, rellenan, fríen, cocinan, cubren de alimentos y meten en salsa en una serie de formas distintas todos los días.

“Tendrá que subir. El aumento del precio de la gasolina nos afecta también, el molino que muele el maíz también utiliza gas”, dijo su hermano José Antonio mientras apila un nuevo conjunto de tortillas recién hechas.

El incremento de los precios del combustible desató saqueos masivos, cientos de arrestos y una ola de protestas en todo el país, los cuales, las fallidas explicaciones de Peña Nieto, no lograron disipar. El peso se derrumbó a nuevos mínimos. “La gente se siente atacada por el gobierno”, dijo Alejandro Schtulmann de la consultora Empra. Una ola de escándalos de corrupción, el deterioro de la economía y el aumento de la inseguridad ya redujeron los niveles de aprobación del Presidente a mínimos históricos antes de las elecciones del próximo año en las que un candidato populista ya tiene la delantera.

El peso brevemente superó la línea de los 22 pesos por dólar el miércoles, cuando Donald Trump se dirigió a los medios, y dijo que esperaba que más automotrices movieran sus operaciones a EU. La moneda recibe golpes por los tuits incendiarios del presidente electo, quien se comprometió a imponer aranceles punitivos a automotrices que produzcan sus vehículos en México.