Jorge Domínguez es un artista mexicano originario de Veracruz, cuya historia comienza cuando trabajaba en una tienda de antigüedades y libros de arte; algo que lo llevó a conocer el trabajo de Salvador Dalí, una de sus mayores inspiraciones para crear.
Actualmente vivimos en un mundo donde el arte conceptual invade las galerías, la técnica plástica ha pasado a un segundo término y dejamos de admirar la belleza del óleo en cuadros que nos inviten a reflexionar sobre la inspiración del autor; justo esta premisa es la que llevó a Domínguez a triunfar en un mercado internacional, donde su surrealismo ha llamado la atención de galerías en Estados Unidos y Europa.
Este artista de 30 años originario de Mata de Otate, Veracruz, con una población de 500 habitantes y parte de la comunidad Tének (huastecos), decidió buscar la manera de obtener sus pigmentos y pinceles a través de la experimentación con materiales naturales, ya que es muy difícil que las herramientas de trabajo que necesita, sean fáciles de conseguir en donde vivía. Desde hace 14 años radica en la Ciudad de México, donde renta un cuarto en la colonia Roma acondicionado como estudio y dormitorio.
En entrevista con Mónica Mateos del periódico La Jornada, el artista reveló que ha solicitado becas al FONCA, pero que hasta el momento no ha recibido ninguna. Pero que su mercado más fuerte se encuentra con coleccionistas privados que creen en su trabajo.
“Tengo un compromiso con mi comunidad, sobre todo, me gusta apoyar a las nuevas generaciones, que se inspiren. Muchos muchachos me preguntan cosas y lo que puedo les respondo, porque mi formación es autodidacta. Pero sigo aprendiendo, y lo más importante, pintando”, dijo el artista en entrevista con la Jornada.
