Arranque lento, con la inercia. Transcurrido ya un buen tramo de la fase inicial del proceso electoral –la selección interna de candidatos, llamada precampaña, que es campaña encubierta–, los aspirantes a la Presidencia de la República y a gobernador del estado coinciden en su alineación, según todas las encuestas difundidas en medios de comunicación, lugares que también se corresponden con la percepción popular.
En el actual proceso, al igual que en 2006, el puntero claro es Andrés Manuel López Obrador, ahora candidato del Partido Morena-PES y PT; esta vez el segundo lugar lo viene ocupando Ricardo Anaya, de la coalición PAN-PRD y MC, y muy abajo de éstos, el candidato del PRI-PVEM-PANAL, José Antonio Meade Kuribreña. La más reciente encuesta publicada hace un par de días en un medio nacional, elaborada por la firma Buendía&Laredo, otorga 32% de las preferencias de votación a AMLO, 26% a Anaya y 16% a Meade; con menos diferencias entre ellos, pero con los mismos lugares; Consulta Mitofsky, en su reporte del mes de enero, concuerda en dichas posiciones de la intención del voto. En ambas los candidatos independientes quedan muy lejos.
Se replican las posiciones en Veracruz
En Veracruz, no obstante factores particulares que se estima deberían influir, las posiciones parecen coincidir con las tendencias hacia las marcas postulantes, sin gran diferenciación aún en el peso de los candidatos. Podría ser un efecto de que la elección federal está remolcando la tendencia local, o solo coincidencia que las percepciones al desempeño partidista en el estado, ubican a las fuerzas electorales en los mismos lugares.
De las pocas encuestas que se conocen sobre el proceso local, la elaborada por Massive Caller a mediados de mes otorga la delantera a Cuitláhuac García de Morena con 30.1%, el segundo lugar al hijo del gobernador Yunes Linares, Miguel Ángel Yunes Márquez, del PAN-PRD-MC, con 28.6% y el tercer lugar a Pepe Yunes, del PRI-PVEM con 14.9%. Esta distribución de la competencia, que solo pueden negar fanáticos priistas o aduladores de Pepe Yunes, la compartió hace unos días Roy Campos, director de la firma encuestadora Mitofsky, quien aunque admitió no tener una medición directa, percibe que en este momento la disputa en Veracruz por las preferencias electorales es entre Cuitláhuac de Morena y Yunes Márquez del PAN-PRD-MC.
Ese sería el probable resultado si hoy fueran las elecciones para Presidente de la República y gobernador del estado, se amarran las encuestadoras y los que se atreven al pronóstico. Pero todavía faltan varios meses para la jornada electoral el próximo 1 de julio. Los candidatos y sus equipos de campaña en posición rezagada pueden no admitir esas tendencias, alegar lo que quieran sobre los posibles errores de medición, cuestionar confianza y validez de las consultas, atribuir sesgos de propaganda o hasta justificar que su estrategia va bien y que corresponde a la etapa inicial del proceso; que los punteros se caerán, que van a recortar y remontar en los próximos meses. Que en el terreno de la movilización y el voto duro se ajustarán. Algo extraordinario tendrán que inventar en las etapas que siguen los que vienen hasta abajo, como es el caso del PRI, castigado a nivel nacional y en el estado.
En lemas políticos, nada nuevo bajo el sol
El inventario de las frases publicitarias y su modalidad como lemas políticos es un almacén de frases hechas y lugares comunes accesible al plagio, el refrito o la adaptación. Los publicistas o estrategas de marketing político no necesitan quebrarse la cabeza ni forzar su creatividad; sólo tienen que convencer al cliente de que la frase revolcada o plagiada es la idónea para la imagen que se desea proyectar; sólo requiere venderla y que no le descubran de donde se la pirateó. Eludir la marca registrada.
Los eslóganes de los candidatos a gobernador de Veracruz son claramente reciclados. Sin necesidad de ir hasta sus orígenes de creación, con frecuencia perdidos en el tiempo, no es difícil rastrear sus usos anteriores. Basta googlearlos. Por ejemplo, el que usa el candidato Pepe Yunes Zorrilla, “Sí, es posible”, lo encontramos idéntico en el lema de Edinson Delgado, un candidato a la presidencia de la república en Colombia el año pasado; pero también lo utilizó 4 años atrás la organización española Juntos Podemos: Sí Es Posible, tan gastado que una página de internet Mujer Real, lo aplica en recetas de terapia sexual Llegar juntos al orgasmo ¡Sí es posible!
El lema de Miguel Ángel Yunes Márquez, “¡Vive el Cambio!”, igualmente no tiene nada de original. Desde 2014 la usó Sony, la marca multinacional japonesa de productos electrónicos en una campaña publicitaria para reciclar equipos en desuso.
Tampoco tiene inventiva el lema de Morena que usa Cuitláhuac García pero que es nacional y hasta nombra a la coalición registrada junto con el PES y el PT, “Juntos haremos historia”, lo usó el priista Jaime Allende González, alcalde de Tula, Hidalgo, en 2011. No se hace nada nuevo bajo el sol, como dice el libro bíblico Eclesiastés, que no me adjudico la frase.
