No hay dinero para sueldos, pero regidores estrenan carros en Cosamaloapan

+ Mucho glamour y pocas obras.

Zona Sur

Pablo Solano Tejeda - 2015-06-28

Con cerca de 100 empleados de confianza a punto de ser dados de baja, el Honorable Ayuntamiento presidido por la Alcaldesa Adriana Maass Michel adquirió varios vehículos de color rojo Modelo Matiz para los regidores.

Lo que ha causado indignación entre los mismos empleados de confianza y ya se gesta una protesta por la falta de pago de sus salarios, algunos refieren les deben hasta cinco quincenas.

Por parte del Ayuntamiento, ya se llevaron a cabo algunas sesiones de cabildo para decidir la suerte de alrededor de cien empleados de confianza. Y trascendió que el despido iniciaría a partir del día martes 30 de junio de 2015. Luego de pagarles sus respectivos adeudos.

Lo que mantiene en la zozobra también a algunos empleados sindicalizados, ya que ha corrido el rumor en los pasillos del palacio que también serían despedidos algunos del gremio liderado por el secretario general Marcelo Lorenzo Montalvo.

Aunado a esta situación, el Ayuntamiento ha quedado a deber mucho a la ciudadanía por la falta de obras de beneficio social importantes.

Y la dirección de comunicación social sólo se ha limitado a resaltar la imagen de la alcaldesa y emitir boletines en los cuales dan a conocer el banderazo de inicio de alguna obra pequeña, pero hasta la fecha de 82 obras anunciadas en el 2014 no se ha sabido cuantas fueron terminadas.

Por lo que sería correcto que se dé a conocer la situación real del estado que guardan las arcas municipales y que obras se han hecho.

Pues causa confusión que por un lado se diga que administraciones pasadas dejaron una deuda que ahoga a la actual administración.

Y no hay para pagar los sueldos, ni a los proveedores. Y por el otro, se adquieran vehículos nuevos para los regidores y alguno que otro director de área.

Y lo peor del caso, es que la alcaldesa Adriana Maass, se pasee con el ya destapado aspirante a la gubernatura de años Pepe Yunes, acompañada de todo un séquito que implica gastos, dedicándose más al glamour que a gobernar y rendirle buenas cuentas a los cosamaloapeños.

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