#Día15 #NosFaltan5

Detienen al “jefe” de la plaza de la organización criminal Cártel de Jalisco “Nueva Generación”, Francisco Navarrete Serna, quien se encontraba operando impunemente en el municipio de Tierra Blanca. ¿Cómo es posible que en dos días, la Gendarmería haya ubicado al supuesto delincuente y Arturo Bermúdez Zurita no haya podido saber de él en cinco años? Cómo dijera mi abuela materna: “A otro perro con ese hueso”.

Definitivamente tanto el gobierno federal como el estatal se tapan con la misma cobija. El circo es similar como lo que ha hecho en Miguel Ángel Osorio Chong con el tema de los normalistas de Ayotzinapa. Ahora la #LaMentiraHistórica la está ejecutando en #TierraBlanca con la captura de un “bracito” de la delincuencia real que opera no tan sólo en dicho lugar, sino en todo el estado.

¿A quién quieren engañar con tal patraña? Tierra Blanca –como todo el estado de Veracruz- se encuentra infestado de delincuentes que vestidos de policías estatales y de la Fuerza Civil se encuentran operando impunemente. El titular de la Secretaría de Seguridad Pública se lava las manos cuando es el principal responsable de la situación que padece la entidad y el Fiscal General de Veracruz, Luis Ángel Bravo Contreras junto con “mal gobernante” Javier Duarte de Ochoa, son total y absolutos cómplices de la situación tan alarmante que los ciudadanos veracruzanos han tenido que padecer.

El gran negocio se apoya verazmente con la falta de regulación en la venta de uniformes tanto de Policía Estatal, Fuerza Civil, Armada de México, Sedena y Ejército Mexicano. Los carteles, sin tener ningún tipo de control, adquieren todo el aditamento necesario para parecer un policía o un militar tanto de la Sedena, Marina o del Ejército. No dudamos que hasta las patrullas oficiales de la SSP le sean prestadas para poder delinquir a sus anchas, aunque el titular de la corporación policíaca en el estado va a justificar el hecho, argumentando que las clonan.

El secuestro de los jóvenes de Playa Vicente en Tierra Blanca, lleva 15 días de haberse perpetrado. Indigna que ahora la Secretaría de Gobernación esté haciendo exactamente el mismo protocolo de mentiras que ejecutó con relación a los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” ubicada en Ayotzinapa del municipio de Tixtla estado de Guerrero. La crueldad con que se han manejado, es exactamente la misma con la que están llevando a cabo el levantón de estos cinco jóvenes, que su único error, es haberse cruzado con la patrulla repleta de policías delincuentes.

¿Qué clase de Secretario de Seguridad Pública es Arturo Bermúdez Zurita que desconoce el tipo de delincuentes que mantiene dentro de su corporación? Tierra Blanca no es el único foco rojo en la entidad, se sabe que con el paso de migrantes centroamericanos tanto la zona sur –Las Choapas, Coatzacoalcos, Minatitlán y la propia Tierra Blanca- en la denominada “La Bestia”, donde cientos de migrantes viajan en el interior de los vagones. Personas vestidas de policías, quienes son los que supuestamente resguardan a los centroamericanos, hacen su gran negocio al imponerles “cuotas” a los migrantes y si no se las entregan, los arrojan hacia las vías por negarse o no tener para el pago de su “seguridad”. Este hecho se ha hecho público en miles de notas informativas, como también lo han contado en innumerables ocasiones los colegas periodistas de la zona sur, luego entonces me pregunto: ¿Por qué Arturo Bermúdez Zurita no ha tomado acciones al respecto? ¿Qué se lo impide? ¿También quiere que Miguel Ángel Osorio Chong le mande la Gendarmería al sur del estado para que hagan su trabajo?

Las voces exigiendo la renuncia del titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, no han cesado. Pero para el mal gobernante, Javier Duarte de Ochoa simplemente lo ha dejado muy claro al gobierno federal –lo dijo claro cuando asesinaron al fotoperiodista, Rubén Espinosa Becerril en la ciudad de México en la colonia Narvarte, cuando fue solicitado por Osorio Chong para que le rindiera cuentas-: “Pídanme lo que quieran, pero menos el cese del secretario de SP”. ¿Le tendrá miedo? Por algo será tanto respeto que le profesa o de plano le sabe sus oscuros actos.

Veracruz es un desastre en todos los tenores. Pese a que este estado es considerado “la joya de la corona” por la importancia que mantiene tanto para el Partido Revolucionario Institucional (PRI) quien ha trabajado en coadyuvancia con el crimen organizado y/o narcotráfico por décadas, pues utilizan dicha ruta para trasladar hacia Estados Unidos los estupefacientes; al parecer, con la alarmante situación en la que lo sumergieron tanto el exiliado, Fidel Herrera Beltrán y su hijo “putativo”, Javier Duarte de Ochoa, esta corriente política se encuentra realmente haciendo sus amarres políticos para impedir que el nutrido gobernante actual sea enviado directito a la cárcel y le quiten todas sus propiedades y lo que ha desviado del erario a sus cuentas.

No dudamos en lo absoluto que Duarte de Ochoa decida poner “tierra de por medio” antes de terminar su ingobernable administración. El recuento de los daños está próximo a ejecutársele en su contra y conforme pase los días, su “poderosa” arbitrariedad con la que mantuvo toda su administración se desvanecerá y sólo le quedará correr como una gallina en medio de una vía. En verdad que no me trago el cuento de que será enviado a la cárcel. No me culpen por ser tan poco crédula, pero los políticos son tan predecibles que ya hasta sabemos cómo operan.

P.D. Las ratas pierden poder. Trasciende que la “nena” preferida de Javier Duarte, Alberto Silva Ramos, deja la dirigencia estatal del PRI. Que en su lugar dejarán al inútil de Amadeo Flores Espinosa. En serio que los priístas nomás reciclan la basura.