RENATO Y OCHOA REZA… ¡YA SE VAN!

2017-05-31


Que el PRI tendrá su peor derrota municipal en estas elecciones del cuatro de junio, es algo previsto, ni se inventa el hilo negro ni se necesita hacer una profunda reflexión para deducirlo. Ganará, de acuerdo a los sondeos realizados desde el Altiplano, entre 35 y 45 alcaldías, no más… y la inmensa mayoría de ellas será en municipios chicos.
Hace pocos días el líder de la bancada priista en San Lázaro, el diputado César Camacho Quiroz, vino a Veracruz para evaluar las campañas municipales y animar a los suyos, pero se regresó con la idea de que todo está peor, incluso, de lo que le habían advertido en los informes internos del CEN del PRI.
- ¿Cómo vamos mi líder? -preguntó sonriendo César Camacho a Renato Alarcón.
- ¡Muy bien Don César! -contestó el líder estatal.
¡Mmmmhhhh! Expresó el líder de la bancada priista, cambiando la sonrisa por un ceño fruncido. Desde ahí, ese “mmmmmhhhh”, su semblante y el ceño fruncido fueron el tenor de la visita y al irse Camacho Quiroz solo dijo “Esto está peor de lo que pensábamos”.
Renato Alarcón aterrizó en el PRI con paracaídas. Muchos comentaban que nadie quería entrarle a la dirigencia, pero no era así, había muchos tiradores que como Renato sabían que el paracaídas era enorme. Renato Alarcón, al tomar protesta en el PRI, sabía que si le iba bien en las elecciones municipales se podría colgar la medalla y aseguraría alguna posición futura, incluso hasta le podría dar para competir por una Senaduría… pero también sabía que si le iba mal en la elección, siempre tendría a quién culpar. ¿Quién le podría reprochar una derrota después de lo que hicieron en Veracruz Javier Duarte y su pandilla?
Renato sabía perfectamente que entrar al PRI era un win-win, era ganar-ganar, y se aventó como gato sabiendo que de cualquier forma caería de pie.
Hoy, a menos de una semana de las elecciones, ni el más optimista “del mundo mundial” augura más de 50 alcaldías ganadas por el PRI. Será una masacre. Incluso, fuentes de la Secretaría de Gobernación confiaron a quien esto escribe que a partir del 5 de junio lloverán las solicitudes de despido de Renato, ya que incluso los resultados positivos no dependerán de él. Renato es, afirman en SEGOB, "un desperdicio".
Pero no crea que por eso se irá Renato Alarcón. En el PRI siempre han sabido premiar muy bien el esfuerzo y la lealtad, aunque los resultados sean adversos.
Hace un par de días un Senador por Veracruz me confió lo que le dijo a Ochoa Reza: “Tú te vas a ir en agosto o en septiembre a más tardar”. Eso fue el preludio de un ríspido momento que continuó con: “Saca las manos del proceso en Veracruz, porque tú no vas a decidir, para cuando haya que tomar la decisión, tú ya no estarás al frente del PRI Nacional”.
Ochoa Reza -incomodó- le cuestionó el por qué aseguraba eso. El razonamiento del Senador fue impecable: “Si te va mal en estas elecciones del 4 de junio el partido te va a mover… y si te va bien, te va a promover”.
Ochoa Reza lo pensó un segundo y soltó la carcajada. Ambos políticos entienden cómo se juega en el PRI. Por tanto, si Usted piensa hacer amarres con Renato Alarcón pensando en un futuro 2018, ni lo piense, ¡olvídelo!… ni Ochoa Reza, ni Renato Alarcón, pasarán de septiembre.
@atticuss1910