La frustración de Filiberto Sánchez

2017-06-12

El Cañero de la Cuenca
Una recurrente en los políticos es usar sus posiciones de “poder” para utilizarlas en contra de quienes lastimen sus intereses. El presidente municipal de Acula, Filiberto Sánchez Aguirre, se ha distinguido por operar bajo diversos tipos de violencia. No se le puede considerar una persona sensata mucho menos honorable.

El pasado 16 de mayo del año en curso, la aun entonces candidata del Partido Acción Nacional, Navis Guzmán Muñoz junto con su dirigente estatal del albiazul, José de Jesús Mancha Alarcón, interpusieron una denuncia en contra de alcalde de Acula, luego de que este intentó atropellarla con su automóvil. El acto se encuentra documentado a través de la denuncia ante la Fiscalía Especializada Para Atender Delitos Electorales (Fepade) en contra del alcalde por los delitos que le resulten.

Su frustración no ha llegado hasta allí. Ahora su insana actitud y falta de ética la centrado en contra de su propio personal, a quienes al parecer culpa del fracaso electoral que su candidato sufrió en las urnas.

Un llamado de auxilio llegó a nuestra redacción y esperemos que el Instituto Veracruzano de las Mujeres (IVM), haga lo conveniente sobre la hostilidad de este sujeto en contra de su personal a cargo. No se le puede quitar el trabajo a nadie a causa de la frustración electorera. No le pedimos honorabilidad y ética a alguien que a todas luces, desconoce a la definición de esas dos palabras, pero si esperamos que el IVM intervenga en esta evidente agresión al género.

Les dejo aquí la historia:

Mi nombre es Ana María Delgado Pacheco ingresé el 01 del 2014 como directora de Desarrollo Social del municipio de Acula, Veracruz, durante la administración del Señor Filiberto Sánchez Aguirre, quien llegó abanderado por Movimiento Ciudadano, que operaba para el PRI. En noviembre del 2016 el alcalde antes citado, me pidió que apoyará a su candidato para la alcaldía el señor Felipe Pineda Barradas, por el Partido Verde Ecologista de México, que es bien sabido por todos que es el PRI disfrazado.

Me rehusé a apoyarlo inicialmente por conocer sus malos antecedentes (se le ha acusado de fraude, de prepotencia y de abuso de autoridad en otros municipios sin presentar denuncias), por ser originario de la ciudad de Perote y por ser uno de los principales opositores de la administración en la que trabajamos. Derivado de mi negación a apoyar a su candidato, me quitó la coordinación de los programas 65 y Más y Próspera, acusando de que yo no podía manejar políticamente los programas para su candidato.

Siempre su trato fue hostil, grosero y prepotente, actitud que se agudizó a partir que mi sobrina la Zulenia Nathani Delgado Pacheco, le fue otorgado el cargo de secretaria vocal del OPLE.

El PAN presentó una denuncia ante el ONPLE municipal en contra del Partido Verde Ecologista de México por organizar un baile proselitista en época no electoral. Como resultado de dicha denuncia, mi sobrina antes mencionada, giró un oficio en calidad de fiscal del pueblo al presidente municipal, preguntándole sobre el evento realizado, a los tres días de ello, el contralor del municipio Alonso Castro de la Rosa se presentó en la oficina que ocupaba en el Ayuntamiento para entregarme un documento que llevaba en mano me dijo: “fírmeme este permiso de trabajo por dos meses sin goce de sueldo” a lo que yo le respondí que no podía firmarlo porque yo no había solicitado ningún permiso porque no andaba en campaña, ni formaba parte de la planilla. Él me respondió que sólo recibía instrucciones del alcalde y que me pedía que solicitara un permiso sin goce de sueldo por dos meses. Le dije que no tenía yo que hacer eso y sospechando que el asunto venía por el trabajo que estaba realizando mi sobrina en el OPLE, le comuniqué mi trabajo no tenía por qué interferir con mis lazos sanguíneos, a lo que el señor Alonso me sugirió que hablará con el alcalde porque parecía que por ahí iba el asunto.

Establecí contacto con el presidente municipal y le cuestioné la razón de su insistente acto de mandarme de licencia sin goce de sueldo por un permiso que una servidora no había solicitado. Sánchez Aguirre –alcalde- me dijo que hiciera caso omiso que sólo lo había hecho como una reacción de coraje porque mi sobrina era parte del organismo electoral anteriormente citado.

El día 1 de junio me presenté a trabajar, pedí un pase de salida. Cuando salía del ayuntamiento el alcalde me abordó y me dijo: Así como tú sobrina tiene los huevos para ser seria, honesta y muy cumplida con su trabajo, así tienes que ser tú y cumplir con tu trabajo y nadie sale a ver mamá, hijo ni una madre no hay permiso para saliditas y quien lo quiera hacer se va a chingar a su madre”.

Me regresé a mi oficina y ya no salí. El evidente hostigamiento laboral –aunque la propia ley te ampara- es una situación que se presenta de manera consecutiva por parte del presidente municipal. Otra acción que regularmente hacía, es referirse a mi persona con groserías o indirectas, tornándose incómodo. Pasadas las elecciones, el día lunes 5 de junio del año en curso, me presenté a las trabajar a las 9 de la mañana al palacio municipal, junto con un grupo de compañeros decidí esperar hasta que abrieran. Al poco tiempo llegó el alcalde en su camioneta y me llamó a señas para que me acerque a su camioneta por el lado opuesto al chofer y me dijo:

“Te mandé un mensaje anoche, pero creo que no lo recibiste, pero te lo digo. Así como tú sobrinos, ni tú, ni tú familia tampoco nunca quisieron entrar en cordura , ahora yo les voy a demostrar cuales son las consecuencias, ya no es posible que estés aquí trabajando así que no te quiero ver parada por aquí, no tienes nada que hacer ese chamaquito no me va a aguantar ningún madrazo y si lo llegó a agarrar lo voy a medio matar y la otra le voy a echar la camioneta encima y no sé, no sé si se me da la gana darte finiquito y te doy el aguinaldo si se me da la chingada gana”. Viendo las circunstancias me retiré del palacio municipal porque temía por mi integridad física, sé que es un hombre muy violento y sería capaz de agarrarme a golpes.

En verdad tengo temor por mi familia y por mí nunca había vivido una situación así, como trabajador siempre cumplí con mi trabajo respetando la jerarquía en este caso de los ediles, tanto del presidente municipal, como del síndico y del regidor, y siempre, busqué a través de mi trabajo servir a mi pueblo y a mi gente. Solo pido respeto a mi integridad física y a la de mi familia, por esto presente una denuncia de los hechos por las amenazas en la Agencia del Ministerio Publico en Cosamaloapan, para que quedara como antecedente por si algo le ocurriera a mi familia y a mí.

Así también pido a las autoridades correspondientes que laboralmente me den lo que por Ley del Trabajo me corresponde. Hago a su vez un llamado al Señor Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares y Presidente del Instituto Estatal de la Mujer, que se respeten mis garantías de lo que marca la Ley en lo que a equidad de género se refiere y que se hagan valer mis derechos como mujer y también la integridad física de mi familia, porque siempre hemos sido personas que jamás hemos hecho mal a nadie y siempre estamos al servicio de Dios.

Atentamente

Ana María Delgado Pacheco