Ana Cecilia Conde Álvarez, investigadora en el Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), urgió la participación de científicos, sobre todo sociales, en el combate al cambio climático.
Al dictar la conferencia virtual “El cambio climático: lo que es y lo que no es”, el pasado lunes 20 de junio, en el marco de la Escuela Internacional de Verano de la Universidad Veracruzana (ISSUV), la investigadora dio un panorama de las principales afectaciones propiciadas por este fenómeno global y plasmó algunas ideas generales.
Entre ellas, que 3.6 mil millones de personas viven en regiones críticas de alta vulnerabilidad al cambio climático, así como el incremento de la temperatura, sequías, inundaciones, deslaves y enfermedades.
Todo ello, evidencia que la mayor parte del calentamiento en los últimos 50 años se atribuye a la acción humana. El 75 por ciento por la quema de combustibles fósiles derivados del petróleo, y 25 por ciento por cambio en el uso del suelo, sobre todo la deforestación.
En la ponencia transmitida a la comunidad UV que se dio cita en la sala de videoconferencias de la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI), y al resto de las regiones universitarias, dio a conocer que 2020 fue uno de los tres años más cálidos para México, Centroamérica y el Caribe, y el segundo para Sudamérica.
También, la sequía generalizada en la región de América Latina y el Caribe ha tenido un impacto significativo en las rutas de navegación interior, el rendimiento de los cultivos y la producción de alimentos, lo que ha provocado un empeoramiento de la inseguridad alimentaria en muchas áreas.
Mencionó además los riesgos existentes para la biodiversidad, degradación del suelo, pesca, ecosistemas marinos, y la reducción de 70 a 90 por ciento adicional de los arrecifes de coral, entre otras problemáticas asociadas al cambio climático.
La científica especializada en los impactos de vulnerabilidad y adaptación ante el cambio climático y la variabilidad climática, en particular en el sector agrícola en México, aseveró que el último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), emitido el 9 de agosto de 2021, mostró que el clima tiene cambios y que el aumento de la temperatura global será más rápido, con eventos más extremos.
“El calentamiento global es un problema ético y político, y no sólo ambiental o físico en la naturaleza. Por ello, se necesita reforzar la relación entre ciencia y política para enfrentar este problema, en un contexto de esta justicia climática.”
Expuso que en el intento por enfrentar el problema, se debe contemplar la igualdad, los derechos humanos y colectivos. También, se requiere la participación de científicos en el combate al cambio climático, principalmente, del ámbito de las ciencias sociales.
Los reportes especiales del Grupo II del IPCC revelan que para cambiar trayectorias se necesita reconocer que hay una diversidad de conocimientos que deben entrar en juego, “poner por delante la guía y protección de salvaguardar los ecosistemas, lo cual debe ser inclusivo, equitativo y justo”.
La investigadora y autora líder del sexto reporte del IPCC, enfatizó que dentro del cambio climático se perciben algunos problemas complejos: educación (cómo transformarla) salud, (incluida la pandemia), salud mental, hambre, obesidad, anorexia, combate al crimen, y muchos otros.
A lo anterior, agregó que las soluciones para dichas situaciones complejas no son verdaderas o falsas, sino buenas o malas, que hagan cambiar de trayectoria.
“No habrá soluciones inmediatas ni definitivas, sino que se tratará el problema como interdisciplinario y transdisciplinario, y los actores claves que provocan el problema son esenciales para buscarlas.”
Dio a conocer que actualmente 195 países son miembros del IPCC. Los gobiernos participan en el proceso de revisión y las sesiones plenarias donde se toman las principales decisiones sobre el programa de trabajo, se aceptan, adoptan y aprueban los informes.