Acciones en seis temas son el compromiso que adquirieron los presidentes de Estados Unidos, Joe Biden, y de México, Andrés Manuel López Obrador, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau: diversidad, equidad e inclusión; cambio climático y medio ambiente; competitividad; migración y desarrollo; salud; y seguridad regional.
Los países se reconocieron como vecinos, socios y con lazos de familia, amistad y “valora, por encima de todo, la libertad, la justicia, los derechos humanos, la igualdad y la democracia. Este es el ADN norteamericano”.
Diversidad, equidad e inclusión
En torno a la diversidad, equidad e inclusión los describen como fundamentales para la fortaleza, la vitalidad y la resiliencia de los tres países, y “reiteraron su compromiso conjunto de proteger los derechos civiles, promover la justicia racial, ampliar la protección para las personas LGBTIQ+ y ofrecer resultados más equitativos para todos”.
También, en asociación con los pueblos indígenas, promoverán soluciones innovadoras y sostenibles que honren el conocimiento tradicional, fomenten el crecimiento liderado por los pueblos indígenas e impulsen la creación de empleos y en el que privilegiarán acciones para mujeres y niñas.
“Mujeres indígenas de los tres países se reunirán en las próximas semanas para facilitar diálogos sobre prioridades y mejores prácticas, incluyendo en los ámbitos del desarrollo político, económico y social. Los tres países reafirmamos nuestro compromiso con la igualdad de género y el empoderamiento de mujeres y niñas en toda su diversidad con el objetivo de mejorar el apoyo financiero y político destinado a sus derechos”, indican.
Cambio climático y medio ambiente
En torno al cambio climático y medio ambiente, México, Estados Unidos y Canadá buscan enfrentar la crisis climática y responder a sus consecuencias.
“Lograr nuestras respectivas contribuciones determinadas a nivel nacional para 2030 en virtud del Acuerdo de París, y trabajar juntos y con otros países para mantener un límite de temperatura de 1.5 grados Celsius al alcance. Para promover la aceptación de recortes ambiciosos en las emisiones, nos uniremos para alinear los enfoques sobre la estimación del costo social de las emisiones de gases de efecto invernadero”.
El compromiso es también con la mitigación climática, adaptación y resiliencia, así como la renovación de enfoque en la reducción de las emisiones de metano de todas las fuentes, con un nuevo enfoque en las emisiones de residuos y explorarán el desarrollo del hidrógeno como una fuente regional de energía limpia y el aumento de la producción y la adopción de vehículos de cero emisiones en América del Norte, así como la transición a combustibles más limpios.
Competitividad
En torno a la competitividad, buscan profundizar la capacidad regional “para atraer inversiones de alta calidad, impulsar la innovación y fortalecer la resiliencia de nuestras economías, reconociendo los beneficios que trae el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC)”.
El objetivo es forjar cadenas de suministro regionales más sólidas, así como promover la inversión específica en industrias clave del futuro, como los semiconductores y las baterías de vehículos eléctricos, que serán fundamentales para avanzar en el desarrollo y la infraestructura de vehículos eléctricos.
Habrá diálogos público-privados y trazarán cadenas de suministro para abordar los desafíos y oportunidades comunes.
“Los minerales críticos son un componente esencial para acelerar la transición de energía limpia de América del Norte. Cada país revisará y mapeará las reservas existentes y potenciales de recursos minerales críticos en la región, cuidando el medio ambiente, respetando las comunidades locales y adhiriéndose a altos estándares éticos”, agrega el comunicado.
Migración y desarrollo
En torno a la migración y desarrollo, cada país de América del Norte asumió compromisos bajo la Declaración de Los Ángeles, en particular con respecto a las vías regulares de migración, entre los que se incluye el trabajo conjunto para impulsar la movilidad laboral en Norteamérica, y han venido cumpliendo estos compromisos.
Destacaron que, desde junio, los tres países tuvieron un número récord de migrantes y refugiados del hemisferio occidental bajo programas laborales y humanitarios nuevos y ampliados.
Las acciones incluyen integrar dar protección y fortalecer la capacidad de asilo para migrantes y refugiados, así como ampliar las vías regulares y atender las causas de origen y los impactos de la migración irregular y el desplazamiento forzado.
Llamaron también a contrarrestar la xenofobia y la discriminación contra las personas migrantes y refugiadas.
“Crear condiciones a fin de mejorar la calidad de vida, especialmente en las comunidades marginadas que son vulnerables al desplazamiento y a la migración forzada interna y regional”, indican.
Parte de esta labor se incluye en el T-MEC para promover prácticas comerciales responsables, implementar obligaciones, así como erradicar el trabajo forzado e infantil en sus cadenas de suministro.
Salud
La salud se enfocará en lanzar una versión actualizada del Plan Norteamericano para la Pandemia y la Influenza Animal (NAPAPI) para mejorar la prevención, preparación, agilidad y brindar una respuesta rápida a las emergencias sanitarias en América del Norte.
“El Grupo de Trabajo de Seguridad Sanitaria de América del Norte desarrollará y lanzará el nuevo y revisado NAPAPI como una plataforma flexible, escalable e intersectorial para fortalecer la preparación y la respuesta regional hacia una gama más amplia de amenazas a la seguridad sanitaria que incluya la influenza y más enfermedades”, señala.
Los tres países se enfocarán en construir sistemas de salud más fuertes y resilientes que satisfagan a las poblaciones.
Seguridad regional
En materia de seguridad existe el compromiso de mejorar el trabajo trilateral para hacer frente al uso de precursores químicos en la producción de sustancias ilegales en América del Norte y para interrumpir el tráfico de drogas, así como enfocarse en temas de salud pública para la prevención, la reducción de daños, el tratamiento y la recuperación.
“Incluye acciones para frenar a actores ilegales y los delitos asociados a lo largo de nuestras fronteras compartidas, incluido el lavado de dinero, la explotación sexual infantil, la trata de personas y el tráfico de armas”, señala el comunicado.
Los tres países continuarán con el Diálogo de América del Norte sobre Política de Drogas y buscarán “la colaboración internacional más amplia para abordar la creciente amenaza mundial de drogas sintéticas, cuando Estados Unidos asuma la presidencia en 2023”.
Otro de los temas del acuerdo conjunto son: las amenazas domésticas, regionales y globales incluyendo amenazas cibernéticas; el enfoque es la recopilación, uso, procesamiento, retención y protección de los datos en registros de nombres de pasajeros (PNR), así como mejores prácticas para mantener la seguridad de las poblaciones de América del Norte ante emergencias relacionadas con desastres naturales y de otro tipo.
Andrés Manuel López Obrador | Joe Biden | Justin Trudeau | Cumbre de Líderes de América del Norte |