El gobernador Cuitláhuac García Jiménez, informó que no tiene registro de que en Veracruz se consuma y distribuya el Fentanilo.
"El que está fuerte es la marihuana y el cristal y estamos sobre de eso".
En conferencia de prensa, García Jiménez, precisó que Veracruz tiene una campaña permanente contra esas drogas "aquí la Marina dio un golpe fuerte en el puerto de Veracruz en relación a estupefacientes".
En ese sentido, el Ejecutivo Estatal, resaltó la dotación de materiales didácticos donde se informa sobre las consecuencias que tiene para la salud ingerir drogas.
De ahí que a través de la Secretaria de Educación (SEV), se llevan a cabo pláticas para convencer a los jóvenes de los daños que ocasiona cualquier tipo de sustancia prohibida.
El fentanilo es un opioide sintético que es hasta 50 veces más fuerte que la heroína y 100 veces más fuerte que la morfina, de acuerdo con las autoridades, además de que es un importante factor contribuyente a las sobredosis mortales y no mortales en los Estados Unidos.
De acuerdo a los expertos, al igual que la heroína, la morfina y otras drogas opioides, el fentanilo actúa uniéndose a los receptores opioides que se encuentran en áreas del cerebro que controlan el dolor y las emociones.
Después de consumir este opioide el cerebro se adapta a la droga y su sensibilidad disminuye, lo que hace que resulte difícil sentir placer con otra cosa que no sea la droga.
Cuando una persona se vuelve adicta, la búsqueda y el consumo de la droga se apodera de su vida. Los efectos del fentanilo incluyen: felicidad extrema, aletargamiento, náuseas, confusión, estreñimiento, sedación, problemas para respirar y pérdida del conocimiento.
Lo que se ha visto en otros países es que las personas que lo consumen pasan por un estado de “zombi”.
Se comportan de manera sonámbula trasladándose de un lado a otro, pérdida de la conciencia y una afectación a la cognición bastante severa que interrumpe la actividad de la corteza prefrontal”.