Sergio Pérez tuvo un desempeño en Austria de los que ha acostumbrado en la Fórmula 1, recuperando lugares después de una nueva mala calificación.
El piloto de Red Bull arrancó desde la posición 15 y terminó tercero en el GP austriaco, pese a las complicaciones de salud que tuvo el fin de semana.
Este buen resultado le ha dado confianza a Checo Pérez después de algunas malas carreras, así que espera que este sea el punto de quiebre para recuperar la forma ganadora que tuvo al inicio de la temporada.
"Fue una gran recuperación para el equipo, una fantástica estrategia y tuvimos un gran ritmo. Fue un muy difícil fin de semana para mí, especialmente en lo físico. Estuve realmente débil, estuve enfermo el jueves, así que no fue un fácil fin de semana", dijo el mexicano.
Checo tuvo una dura pelea por el tercer lugar con el español Carlos Sainz, de Ferrari, y al final el de Red Bull logró imponerse.
"Fue duro pero justo. Siempre es un placer correr contra ellos. Los Ferrari estaban muy fuertes, especialmente en la baja velocidad (corners), tenían buena tracción, pero es un buen regreso.
"Ha sido un poco difícil para mí, así que estamos de regreso y podemos mantener esa consistencia", expuso.
La próxima carrera en la F1 será el siguiente domingo, con el Gran Premio de Gran Bretaña, que comienza actividades el viernes con las prácticas y la Clasificación el sábado, esta vez sin Spring.