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Este lunes se dio a conocer que Hipólito Deschamps, ex alcalde de Medellín de Bravo, será el candidato de Movimiento Ciudadano a la gubernatura de Veracruz.
Ni Sergio Gil Rullán (que aparecía en los anuncios espectaculares por todo el estado) ni el “preso redimido” José Manuel del Río Virgen, lograron figurar o llegar a ser reconocidos.
El rumor que se comenta al interior de Movimiento Ciudadano es que los primeros sorprendidos con la designación de Deschamps fueron precisamente Gil y Del Virgen. Que además hay instrucciones desde el Comité Nacional para que la dirigencia estatal no intervenga en nada porque la gente de Deschamps se hará cargo.
Hipólito apenas renunció la semana pasada al Partido Acción Nacional (PAN), en el que militó y se identificó como parte del grupo encabezado por el ex dirigente estatal y diputado local Enrique Cambranis, hoy aliado de la familia Yunes Márquez, cuyo patriarca Miguel Ángel fue el mini-gobernador de dos años por el periodo 2016-2018.
Debe comentarse que el corredor de municipios conurbados Veracruz-Boca del Río-Medellín es bastión de dicha familia, por lo que han colocado tanto en las alcaldías como en otros cargos de elección popular a gente afín a su grupo, incluso desechando y rechazando a panistas de la zona que no se cuadran con ellos.
Uno de los aliados para sostener ese bastón es el diputado local Enrique Cambranis, ex dirigente estatal del PAN.
En este caso, Hipólito Deschamps, más que panista, es cambranista y, por ende, yunista.
Lo de su renuncia al PAN quizás sorprendió a algunos, pero los que le saben a esto de la política advirtieron lo que podría ser el nuevo truco/farsa de los Yunes y su aliado Dante Delgado Rannauro, propietario de Movimiento Ciudadano Inc.
Un poco de contexto: durante años, en la clase política del reciente priato siempre se comentó que Dante odiaba a Miguel Ángel Yunes Linares por haberlo encarcelado en el penal de Pacho Viejo y que además no le permitió ver a su padre moribundo mientras estaba en prisión.
Pero el billete es el billete, aunado a los intereses políticos. Fue así que Dante Delgado, con todo el supuesto odio que le tenía a los Yunes, decidió apoyar a Miguel Ángel Yunes Jr. a la gubernatura en la campaña de 2018… pero éste perdió.
Esa jugada de Dante fue muy criticada por los priístas, quienes lo señalaban de venderse por levantarle la mano al hijo de su verdugo en el pasado. “Falta de dignidad”, es lo menos que se escuchaba.
Curioso: ahora esos mismos priístas están en la alianza PRI-PAN-PRD apoyando supuestamente a un priísta, pero en los hechos haciendo la talacha para los hermanitos Yunes que buscan el Senado.
Pero tampoco es sorpresa que Dante y Movimiento Ciudadano están ligados a los Yunes.
En el círculo de la “alta suciedad” del puerto de Veracruz es harto conocido que actores relevantes del partido naranja y yunistas mantienen relaciones desde hace años.
Esta cercanía evidente y de la que todos los grillos saben, hace sospechar que la renuncia de Deschamps es sólo una jugada calculada de los Yunes vía Cambranis, aparentando una división al interior de su grupo político para fortalecer a Movimiento Ciudadano.
Incluso hay quienes hasta apuestan que en una de esas hasta le quitan el partido al Tío Dante en Veracruz (como ocurrió con el PAN, cuando botaron a la gaver al “Pipo” Vázquez) para el proyecto de 2030 o Dante ya se las vendió —la franquicia, no sea alburero— para el mismo fin.
Y es que hay una ruta muy clara para lo anterior: Miguel Ángel Yunes Márquez, hijo del exgobernador, va a ser senador incluso perdiendo la elección —otra vez— debido a la mentada primera minoría que le permite llegar al escaño; desde esa posición buscará la gubernatura de Veracruz en 2030 para quitarse la espina que le dejó enterrada Cuitláhuac, teniendo a Movimiento Ciudadano como aliado en crecimiento (y con respaldo de grupos millonarios fuertes como los que hay en Nuevo León) en momentos donde partidos como el PRD o el PRI están casi borrados del mapa político.
El que Hipólito Deschamps pase para ese partido, es sólo como para afianzar ese plan.
De hecho, se ve que Movimiento Ciudadano prepara una guerra de lodo intensa contra Morena, el gobernador Cuitláhuac García y la virtual candidata Rocío Nahle, porque también sumaron a sus filas a la jueza Angélica Sánchez como candidata al Senado, a quien el Gobierno del Estado y la Fiscalía del Estado acusó de liberar a delincuentes y hasta la mandó un rato al penal de Pacho Viejo.
Muchos dirán: “Pero Dante trae pleito con partidos de oposición”…
Sí, a nivel nacional los mandó al carajo y hasta los amenazó por haberles bajado a su candidato presidencial Samuel García, pero la historia es distinta en la entidad veracruzana.
En Veracruz, Movimiento Ciudadano y el PAN yunista (PRI y PRD ya son meros satélites) están consolidados más como grupos/familias que están buscando recuperar los privilegios del poder. Aquí pesan más los intereses que encabezan Dante Delgado y los Yunes, mismos que utilizan a su casi pariente PepeYu para llegar al Senado, a sabiendas de que la gubernatura está perdida para la oposición en 2024.
Tampoco debe olvidarse que hasta el Tío Dante propuso la desaparición de poderes en Veracruz y hasta creó con su cuate Ricardo Monreal en el Senado una “comisión patito” quesque para destituir al gobernador, misma que fue disuelta y Dante quedó en ridículo nacional cuando se vio obligado a renunciar a la presidencia de la misma.
Así que la farsa de MC y los yunistas ya se verá conforme pase el tiempo. Es cosa de ir viendo cómo se irá acomodando todo en esa mezcolanza azul-naranja.
De entrada, por ejemplo, se sabe que Enrique Cambranis está operando para que tanto PAN como Movimiento Ciudadano apoyen a candidatos en la zona conurbada, más específicamente a Guillermo Herrada, rumbo a la alcaldía de Medellín de Bravo, de donde surgió Hipólito Deschamps; esto augura que podría haber más alianzas en todo el estado, con otros cargos.
Por cierto, ¿sabe qué color surge al mezclar el azul con el naranja? El marrón, el color de la puritita esencia de esa alianza no escrita. Ese pacto escatológico que ya se veía venir desde hace rato.
NOTA PARA PEGAR EN EL REFRI: Que será el domingo 11 de febrero cuando se haga un nombramiento simbólico a Rocío Nahle para ungirle como la candidata oficial de la coalición “Sigamos Haciendo Historia en Veracruz” para la gubernatura. El evento se llevará a cabo en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río… Previo a eso, la ex secretaria de Energía cerrará precampaña en Alvarado, el sábado a las 5 de la tarde.
OTRA NOTA: Que la lista de diputados pluris en la alianza PRIANRD la encabeza Joaquín Guzmán “El (be)Chapito” de Tantoyuca; le seguiría Américo Zúñiga, el ex alcalde de Xalapa (a quien hace poco lo estaban destapando para candidato a la local o federal) y José Rodrigo Marín Franco, ex secretario de Sedesol en el mini-gobierno de Yunes Linares… Que la lectura, en este sentido, es que prefieren mandarlos a la segura para las curules en el Congreso del Estado y no apostarle a los comicios porque le “sacatean” al power que trae Morena.
LA ÚLTIMA PORQUE LUNES MUY MOVIDO: Este martes alrededor del mediodía, en la Casa Rébsamen de Xalapa (nueva sede de la Secretaría de Turismo) se hará la presentación de la Cumbre Tajín en su edición 2024, la última de esta administración. Se sabe que habrá una fuerte inversión en lo que respecta a la ornamentación del parque temático Takilhsukut, así como otras amenidades para los visitantes. Pretenden cerrar en grande.
