Rodolfo Guzmán Huerta, oriundo de Tulancingo, Hgo., marcó toda una época en México con sus extraordinarias actuaciones como luchador profesional, dándole vida al personaje de “Santo, el Enmascarado de Plata”.
Fue el 26 de julio de 1942, cuando el profesor Rodolfo Guzmán Huerta actúa por primera vez en los encordados como “El Santo”, en una riña encarnizada con “Lobo Negro”, quien después sería su compañero en múltiples películas que filmaron.
En la mítica Arena México de la capital de la república, se empezó a formar la leyenda de la lucha libre con “El Santo”, lugar donde escenificó sangrientas batallas con aquel “Boby” Bonales, también conocido como “La Maravilla Moreliana” y con el legendario “Black Shadow”, a quien el enmascarado de plata le quitara su máscara obligándolo de esta forma a seguir luchando como Alejandro Cruz, su nombre de pila.
La lucha libre en México se vio impulsada en la última etapa del sexenio de Don Miguel Alemán Valdés como presidente de la república, eran los albores de los años cincuenta. Se transmitían las luchas por televisión (suspendidas en 1954). Por esos años el editor José G. Cruz comenzó a publicar su exitosa revista de “Santo el Enmascarado de Plata”, lo que le dio más fama a este legendario luchador. Todo México quería a “El Santo”. La incógnita de su rostro lo acompañaría hasta su muerte.
Para finales de los años cincuenta, el luchador plateado comenzó a estelarizar películas en la época de oro del cine mexicano. Fernando Osés y Enrique Sambrano escribieron las dos primeras cintas para “El Santo”: Santo Contra el Cerebro del Mal y Santo Contra los Hombres Infernales”. La fama que había adquirido “El Santo” como luchador lo convirtió en el héroe de los niños que leían ávidamente la historieta de José G. Cruz.
“El Santo” filmó 24 películas taquilleras en las que alternó lo mismo con “Blue Demon” que con Don Gaspar Enaine “Capulina”. En el Toreo de 4 Caminos escenificó sus últimas luchas. Rodolfo Guzmán Huerta seguía luchando pensando ya en el retiro. En 50 años de actividad había participado en más de 10 mil combates.
Víctima de un infarto al miocardio dejó de existir el héroe de mil batallas el 5 de febrero de 1984, al concluir una presentación se agotó y en su camerino se acostó a reposar. A las nueve de la noche que empezaba la función de lucha libre en dónde se tenía que presentar, ahí anunciaron la noticia de su muerte.