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La ex gobernadora de Yucatán e integrante del Frente Amplio de Renovación del PRI Dulce María Sauri Riancho, aseguró que pretensión de reelegirse de Alejandro Moreno Cárdenas en la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) daría la estocada final a este instituto político y deteriora cualquier oportunidad de su recuperación.
Entrevistada, antes de reunión que sostuvo con militantes priistas veracruzanos para hablar de la batalla legal que llevan ante el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para invalidar el proceso de elección que de manera irregular convocó el actual dirigente nacional priista, Alejandro Moreno., la también exdirigente nacional del PRI señaló que el dirigente rechaza establecer un diálogo.
“Él se quiere quedar en el PRI, nosotros queremos que el PRI viva, (y su reelección) sería deteriorar la posibilidad de recuperación que pudiera tener el partido. Ya lo he dicho en varias ocasiones y lo reitero: deberíamos tener la humildad de vernos en el espejo la situación del Partido de la Revolución Democrática (PRD)”.
Expresó que el partido del Sol Azteca tuvo en 2018 un porcentaje semejante al que el PRI tuvo en las elecciones de junio de 2024. “El PRD en el 2021 tuvo la mitad, menos del 6% de la votación y perdió el registro en este año. Yo no quiero que al PRI le pase eso. Yo quiero que el PRI llegue al centenario en 2029, fuerte y dispuesto a participar en las oposiciones unidad que hay que construir en el proceso electoral del 2030”, añadió.
Consideró que ese es el propósito central de esta lucha de priistas de todas las generaciones que tenemos la causa de querer al PRI y pensar que tiene mucho que aportar para el futuro democrático de México todavía.
Sin embargo, no hay diálogo con la actual dirigencia nacional y se preguntó: qué acercamiento podemos tener con una dirigencia que, en vez de reconocer que su periodo estatutario ya concluyó, que hay necesidad de hacer una gran asamblea y que se oigan todas las voces, si n embargo, sólo se dedica a una reforma a los estatutos, al candado que evita la reelección de la dirigencia.
Rechazó que haya sumisión para no ventilar el problema e indicó que fueron conscientes de que había y hay un bien superior, que para nosotros siempre es la institución y para las campañas el Frente Amplio Opositor y sostuvo que la situación que actualmente se vive al interior del tricolor es un retroceso político, al perder posiciones en el país, gubernaturas y espacios en los congresos, tanto federal como en las entidades federativas.
En ese contexto, señaló la difícil situación que el PRI vive actualmente y mencionó que si no se hubiera construido la coalición electoral con el PAN y el PRD, la situación hubiera sido desfavorable, se estaría atribuyendo a una actitud del PRI no haber logrado el triunfo electoral.
Considero necesario hacer una evaluación de los resultados del proceso electoral del 2 de junio y dentro de ella, ponderar la política de coaliciones y alianzas, lo cual es indispensable y en vez de eso, la dirigencia nacional del PRI decidió convocar de manera apresurada a una asamblea nacional al día siguiente de la jornada electoral, sin haber terminado el cómputo de las casillas, dejando a un lado la cuestión democrática para definir estos procesos de renovación.
Ante la poca afluencia de militantes y simpatizantes a la reunión en la capital veracruzana, la exdirigente nacional priista señaló que no aspiran a eventos de masas, sino que compañeras y compañeros de partido que comparten inquietudes sobre el futuro del PRI podamos dialogar.
“No pretendemos tener ni las respuestas a todas las preguntas, mucho menos una visión, lo que sí podemos garantizar es que es posible construir esa visión si hay voluntad y un espíritu de diálogo y apertura al interior del partido. Lo hemos hecho antes y lo podemos hacer ahora”, concluyó.
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