El Ministerio de Exteriores ruso consideró que el ex mandatario egipcio evitó más muertes de manifestantes con su renuncia
Internacionales
- 2012-01-07
Rusia pidió hoy a Egipto que el ex presidente egipcio Hosni Mubarak no sea condenado a muerte y que tenga en cuenta consideraciones humanitarias.
Una nota del Ministerio ruso de Asuntos Exteriores aparecida en su web oficial señala que Mubarak es "una persona de edad muy avanzada y que, según las informaciones, está gravemente enfermo".
La diplomacia rusa recuerda que en febrero pasado Mubarak tomó la decisión de renunciar al poder, lo que en gran medida permitió evitar más víctimas inocentes.
El pasado jueves la Fiscalía General egipcia pidió la horca para Mubarak, de 83 años, por su implicación en el asesinato premeditado de manifestantes durante la Revolución del 25 de enero que acabó con su renuncia.
"El juicio en El Cairo continúa, pero semejantes informaciones son acogidas en Moscú con preocupación", dice la declaración rusa, que añade que el proceso es un asunto interno de Egipto.
"Se trata de asuntos internos de un país amigo, Egipto, y confiamos que las decisiones finales serán aprobadas de acuerdo a los más altos estándares internacionales", recalca la cancillería.
La petición de pena de muerte del Ministerio Público egipcio por este delito alcanza, igualmente, al ex ministro del Interior Habib al Adli y a seis de sus ayudantes.
Según la Fiscalía, Al Adli y Mubarak, quien también es juzgado por un presunto delito de corrupción junto con sus hijos Gamal y Alaa, tuvieron una "responsabilidad directa" en la muerte de los manifestantes.