Inicia juicio contra Chirac por malversación de fondos

Además, está acusado de "abuso de confianza" y "apoderamiento ilícito de intereses" por dos causas referidas a una treintena de empleos ficticios en los años 90 que sirvieron para afianzar sus ambiciones políticas.

Internacionales

- 2011-03-07

París. El juicio penal contra el ex presidente francés Jacques Chirac por presuntos empleos de favor cuando era alcalde de París, comenzó este lunes poco después de las 13:30 locales (12:30 GMT) ante el Tribunal Correccional de París, en ausencia del ex mandatario.

El Tribunal anunció que el martes se pronunciará sobre un recurso de la defensa que podría aplazar el desarrollo del proceso.

"El tribunal anunciará su decisión el martes a las 13:30" locales (12:30 GMT), anunció el presidente del Tribunal, Dominique Pauthe, antes de suspender la audiencia.

El juez Pauthe hizo el anuncio después de que el fiscal de París, Jean Claude Marin, acogiera el recurso interpuesto la semana pasada por el abogado de la defensa Jean Yves Le Borgne.

"Planteo el asunto prioritario de constitucionalidad", afirmó Le Borgne poco después de quedar abierto este histórico juicio, el primero contra un ex jefe de Estado en Francia.

El recurso planteado por Le Borgne, abogado de uno de los co-acusados, se refiere a un procedimiento sobre la no prescripción de los hechos que se juzgan.

"La noción de prescripción es central en este caso", sostuvo el letrado, que defiende al ex director de gabinete de Chirac cuando era alcalde de París (1977-95).

Según el abogado, el texto que impidió la prescripción de los hechos reprochados es contrario a la Constitución.

Si el Tribunal acepta este recurso, lo tiene que transmitir a la Corte de Casación, que tiene tres meses de plazo para pronunciarse. Luego puede someterse el asunto al Consejo Constitucional.

Chirac, de 78 años, presidente de Francia entre 1995 y 2007, está acusado de los delitos de "malversación de fondos", "abuso de confianza" y "apoderamiento ilícito de intereses" por dos causas referidas a una treintena de empleos ficticios en los años 90 que sirvieron para afianzar sus ambiciones políticas con miras a la presidencia.

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