Oposición critica la gestión de Kan en la crisis nuclear
Internacionales
- 2011-04-15
La frágil tregua política posterior al desastre natural en Japón se terminó ayer, cuando el jefe del principal partido de la oposición pidió que el impopular primer ministro Naoto Kan dimita por su manejo de la catástrofe y de la posterior crisis nuclear.
En la planta nuclear de Fukushima Daiichi, los ingenieros seguían tratando de encontrar una nueva forma de enfriar uno de los seis reactores afectados y la Agencia de Seguridad Nuclear e Industrial de Japón (ASNJ) indicó que es “altamente probable” que haya un agujero en la unidad de supresión del reactor.
Kan, cuyo respaldo público se sitúa en torno al 30%, buscaba formar una gran coalición para ayudar al país a recuperarse de su peor desastre natural de la historia y aprobar leyes para pagar el mayor plan de reconstrucción nacional desde la Segunda Guerra Mundial. El Partido Democrático de Kan controla la Cámara baja del Parlamento pero necesita la ayuda de la oposición para aprobar las leyes, porque no tiene mayoría en la Cámara Alta, que puede bloquear la nueva legislación.
Pero el jefe de la principal formación opositora, el Partido Liberal Democrático (PLD) —que la semana pasada se negó a respaldar al gobierno— pidió ayer a Kan que se marche. “Ha llegado la hora para que (el primer ministro) decida si se va o se queda”, dijo la agencia de noticias Kyodo citando a Sadakazu Tanigaki en una rueda de prensa.
Las declaraciones de Tanigaki reflejan la postura de muchos en su partido conservador que quieren que Kan dimita como condición para formar cualquier coalición.
Dentro del mismo partido del premier han surgido voces que piden que se vaya, incluyendo Ichiro Ozawa, un importante miembro del oficialismo que censuró las gestión de Kan. El presidente de la Cámara alta, Takeo Nishioka, un conocido crítico de Kan, también pidió la renuncia del primer ministro, dijo Kyodo.
Sin embargo, no
es probable que Kan, quien asumió el poder apenas en junio pasado, renuncie tan fácilmente, y la oposición puede arriesgarse a una lluvia de críticas si trata de meter en una batalla política los presupuestos del desastre, dijeron analistas.
Por primera vez desde el terremoto y tsunami del 11 de marzo, que han dejado más de 13 mil muertos, la policía comenzó ayer a buscar víctimas en un radio de 10 kilómetros alrededor de la central nuclear de Fukushima, pese a los temores de radiactividad.
La ASN advirtió que quizá se necesite un nuevo plan para enfriar uno de los seis reactores de la planta, a causa del gran volumen de agua altamente radiactiva del lugar, y se iban a llevar a cabo pruebas para determinar si las barras de combustible están emitiendo radiactividad.