Un reporte elaborado por Freedom House destaca que la concentración en el sector telecomunicaciones dificulta la expansión de la red
Internacionales
- 2011-04-19
El ingreso de México a la era global de internet se ha producido de forma desigual a los países que conforman la OCDE, con un régimen “parcial” de libertades y con problemas de acceso derivados de una falta de competencia en el sector de telecomunicaciones, posiciones de dominio en las redes de telefonía, tarifas caras y falta de infraestructura.
Según el reporte Libertad en la Red 2011 elaborado por la organización Freedom House y difundido ayer, aunque internet y las redes sociales como Facebook y Twitter crecen en México y se han convertido en herramienta clave de la sociedad contra la violencia y suplir las carencias del Estado en materia de alerta informativa, la concentración de telecomunicaciones dificulta la expansión de la red.
Además, subraya el reporte, “el marco legal de México en el sector de telecomunicaciones es complicado y desfasado”.
El informe hace eco de las críticas de defensores de la libertad de expresión contra organismos como Cofetel y Comisión Federal de la Competencia (CFC), al señalar que los responsables de velar contra la concentración en el sector de telecomunicaciones “carecen de independencia”.
A pesar de ello, el crecimiento de internet en México es uno de los más dinámicos desde su incursión en febrero de 1989; aunque el acceso a la red dista aún mucho de colocar al país entre el pelotón de avanzada de la OCDE —donde por cada 100 habitantes hay 20 suscriptores—, la penetración ha sido constante y 28% de la población ya tiene acceso a internet.
Según las estadísticas del reporte, actualmente México tiene 9.5 suscriptores en la red por cada 100 habitantes.
Precisamente, el avance de internet, y a través de ésta de las redes sociales, ha hecho de portales como Facebook y Twitter de los más útiles para una sociedad que comienza a comunicarse, para hacer frente al fenómeno de la violencia en distintos puntos de la República:
“Los ciudadanos han echado mano de Facebook y de Twitter para intercambiar información relacionada con la violencia de los cárteles y prevenir a comunidades locales sobre situaciones peligrosas”, indica el informe.
Narcos también usan la red
Paradójicamente, las virtudes multidireccionales de internet la han convertido también en un útil recurso para narcotraficantes o el crimen organizado, a fin de poder comunicarse entre sí:
“En una más perturbadora tendencia, los cárteles de la droga también han comenzado a hacer uso de las aplicaciones de las redes sociales para intercambiar información sobre controles militares, lo que ha motivado el llamado de algunos políticos mexicanos para ejercer un mayor monitoreo gubernamental y una mayor regulación de ciertas herramientas en internet”.
En el reporte se señala que, a pesar de que México se encuentra libre de toda censura en internet y que no existen leyes que restrinjan a medios de comunicación por la red, se han dado algunos casos en los que autoridades gubernamentales han intervenido para retirar de la red ciertos materiales o videos que han tenido contenido político.