Dos bombas estallan casi simultáneamente en un concurrido mercado en Bagdad, cerca de un venerado altar chií; hay 35 heridos
Internacionales
Excelsior - 2012-10-20
Dos bombas estallaron el sábado en un concurrido mercado en Bagdad, cerca de un venerado altar chií, con resultado de al menos 11 personas muertas, dijeron las autoridades, en un hecho de violencia que puso fin a varios días de relativa calma en la capital iraquí.
Las bombas estallaron con diferencia de casi un minuto una de la otra y al parecer estaban dirigidas a intimidar a la población chií, que es con frecuencia objetivo de los insurgentes suníes en Irak.
Los atentados explosivos ocurrieron a unos 500 metros de un altar donde se encuentran las tumbas de dos imanes venerados y causaron daños a comercios e inmuebles cercanos, señaló la policía, la cual confirmó la cifra de víctimas.
Las bombas estallaron en momentos en que numerosas personas adelantaban sus compras de ropa nueva con motivo de la fiesta musulmana del Eid al-Adha, que comienza dentro de una semana.
"Era un día concurrido de compras, había mucha gente", señaló Ahmed Nasser, dueño de un puesto fijo.
"Cuando salí, vi muchos cochecitos de compras y puestos incendiados, los niños lloraban y las mujeres gritaban de miedo. El pánico cundía en el lugar", agregó.
Jornada violenta
Las autoridades dijeron que al menos 35 personas resultaron heridas a causa de las explosiones, que elevaron a 15 la cifra de muertos desde el viernes en todo Irak.
Horas antes, individuos armados abrieron fuego contra una patrulla de la policía en el vecindario chií de al-Shaab, donde mataron a dos agentes e hirieron a otro.
En la noche del viernes, en el distrito de Karradah, individuos mataron a tiros a un teniente coronel de la policía que trabajaba en el Directorio Estatal de Identidades, según las autoridades.
Portavoces de hospitales confirmaron la cifra de víctimas fatales. Todas las fuentes solicitaron el anonimato debido a que no estaban autorizadas a hacer declaraciones a la prensa.
Otros individuos armados también mataron en la mañana a un funcionario de una prisión en un ataque en el que abrieron fuego desde un vehículo en movimiento durante la hora de mayor tráfico en el este de Bagdad, dijo el portavoz del Ministerio de Justicia, Haider al-Saadi.
Los hechos de violencia habían tenido una ligera disminución en Irak respecto de su periodo de mayor intensidad, de 2005 a 2008, aunque la insurgencia lanza frecuentes ataques contra las autoridades y las fuerzas de seguridad en un intento por socavar al gobierno predominantemente chií.
Debido a los estallidos de las bombas y los ataques a tiros, el sábado fue la jornada más sangrienta en Irak desde la del 30 de septiembre, cuando hubo 26 muertos a causa de un ataque a tiros contra fuerzas de seguridad y una oleada de estallidos coordinados en vecindarios chiíes.
