'Se encienden' protestas previo a la apertura de la Copa Confederaciones
+Alrededor de 400 manifestantes, en Brasilia, bloquearon las vías de acceso a la sede donde será la ceremonia inaugural del evento; denuncian elevados gastos públicos, desalojos forzados, enormes gastos de la Copa del Mundo, entre otros.
Internacionales
MILENIO - 2013-06-14
Unos 400 manifestantes quemaron neumáticos y bloquearon el viernes las vías de acceso al estadio de Brasilia, sede del juego de apertura de la Copa Confederaciones el sábado, tras violentas protestas en Sao Paulo y Río de Janeiro que dejaron centenares de detenidos y heridos.
Los manifestantes quemaron también conos de señalización de la policía de tránsito y formaron barreras humanas para bloquear el acceso al estadio Mané Garrincha, que debe acoger el sábado la ceremonia inaugural y el primer juego de la Copa Confederaciones, entre Japón y Brasil.
Entre otras reivindicaciones, denuncian los elevados gastos públicos para el Mundial-2014 y los desalojos forzados de decenas de miles de personas en todo el país debido a las obras.
Desde varios puntos de la ciudad se veía salir una gran columna de humo negro en los alrededores del escenario deportivo.
"¿Copa para quién?"
La policía militar indicó que se trata de una protesta del "Movimiento Sin Techo" que exige la adjudicación de viviendas en la ciudad.
Pero varios manifestantes consultados por la prensa denuncian los enormes gastos de la Copa del Mundo y afirman su solidaridad con las manifestaciones por el encarecimiento del transporte en Sao Paulo, Río y otras ciudades brasileñas, donde varias protestas han sido reprimidas violentamente por la policía.
Algunos de ellos portaban carteles en los que se leía "¿Copa para quién?" en rechazo a los 15 mil millones de dólares que el gobierno prevé destinar a inversiones públicas para el Mundial-2014.
"Nuestra reivindicación principal es contra la política de inversiones del dinero en otras áreas que no son la salud y la educación", dijo al sitio web G1 Priscila Brito, una de las manifestantes y miembro del Comité Popular de la Copa, un movimiento social crítico de la organización del Mundial en el país.
También protestan por los desalojos forzados a raíz de las obras del Mundial-2014 y los Juegos Olímpicos de 2016 en Rio, que han afectado en su opinión a 250.000 personas en todo el país.
"La policía trasladó varias unidades al sitio y está negociando con los manifestantes. El tránsito está bloqueado, pero no hay enfrentamientos", señaló una fuente de la policía militar.
Violentas protestas contra el alza en las tarifas del transporte público tuvieron lugar el jueves de noche en Sao Paulo y Río de Janeiro, y en menor intensidad en otras ciudades de Brasil como Porto Alegre (sur), Curitiba (sur), Maceió y Natal (noreste).
Las protestas tienen lugar en momentos que Brasil experimenta un débil crecimiento económico e inflación, lo cual ha provocado una caída de la popularidad del gobierno de Dilma Rousseff.
Represión policial en Sao Paulo
Miles de manifestantes bloquearon avenidas céntricas, destrozaron autobuses, incendiaron basura y se enfrentaron con la policía en Sao Paulo para revertir el alza de tarifas del boleto de metro, bus y tren de 3 a 3,2 reales (1,5 a 1,6 dólares).
El saldo fue de 232 personas detenidas, dijo a la AFP un portavoz de la policía de Sao Paulo. La gran mayoría ya fueron liberadas, precisó.
Según la prensa local, unas cien personas resultaron heridas en la protesta, 12 de ellas policías.
Una decena de periodistas fueron heridos.
Una impactante foto de una joven periodista del diario Folha de Sao Paulo con el rostro ensangrentado tras recibir un disparo de bala de goma en el ojo recorrió las portadas de medios brasileños e internacionales y las redes sociales.
El propio alcalde de Sao Paulo, Fernando Haddad, criticó la actuación de la policía.
"El martes (en una protesta anterior), la imagen que quedó fue de violencia por parte de los manifestantes. Ahora, infelizmente, la imagen que quedó es de violencia policial", declaró Haddad a la prensa local.
Las ONG Amnistía Internacional (AI) y Reporteros Sin Fronteras (RSF) criticaron duramente la represión policial y pidieron al gobierno de Rousseff una investigación para hallar a los responsables.
"Abusos como éstos, acompañados por arrestos y violencias que tienen como blanco a algunos periodistas, reclaman una investigación profunda y sanciones proporcionales", dijo RSF en un comunicado.
En Rio de Janeiro, una de las seis sedes de la Copa Confederaciones que arranca el sábado, otra protesta de más de 2 mil personas contra el alza del precio del boleto de autobús se saldó el jueves de noche con 18 detenidos y al menos dos heridos.
"No aguantamos más estos aumentos en cadena, mientras se gasta millones con la Copa del Mundo", dijo una de las manifestantes, la estudiante Halux Maranhão.