EU toma noticias de México para ejemplificar su ‘peor’ imagen exterior
El Departamento de Estado dijo que la imagen de EU en el exterior está decayendo debido al cierre de gobierno, citó noticias de diarios en México y España
Internacionales
Milenio.com - 2013-10-04
El Departamento de Estado de Estados Unidos lamentó el efecto que la paralización parcial que el Gobierno está teniendo en su imagen exterior, y citó noticias de dos periódicos en español de España y México para ilustrar cómo se está hablando del país norteamericano en el extranjero.
En su conferencia de prensa diaria, una portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, mencionó varios titulares que "reflejan que (el cierre de la Administración) afecta negativamente a la posición (estadunidense) en el extranjero".
Harf citó una columna de opinión publicada este jueves en el diario español "El País", que señalaba que "la política del odio pone al país (EU) al borde del colapso económico".
Destacó además una noticia publicada en un diario de México
Harf escogió también una frase del diario United Daily News de Taiwán, según la cual "EU, una vez modelo de democracia, está ahora atrapado en un lodazal"; y otra que apareció en el rotativo indio "The New Indian Express", que indicaba que "el mundo se estremece pensando en una situación en la que Washington no sea capaz de hacer frente a sus compromisos financieros".
La portavoz culpó al Congreso de dañar la imagen estadunidense con un cierre de la Administración "completamente evitable".
Para un Congreso que habla tanto del carácter excepcional de Estados Unidos, están enviando el mensaje opuesto en todo el mundo", afirmó Harf.
El Gobierno de Barack Obama mantiene que la Cámara de Representantes, de mayoría republicana, tiene la responsabilidad de aprobar una presupuesto para solucionar la paralización de la Administración, que ha dejado en casa a unos 800 mil trabajadores federales.
Mientras, los republicanos insisten en la necesidad de negociar y siguen condicionando la financiación del Gobierno a retrasos en la aplicación de la reforma sanitaria, algo que rechazan los demócratas y la Casa Blanca.