El magistrado federal William Pauley aseguró que la recolección de datos de la Agencia Nacional de Seguridad no ha sido utilizada con otro propósito más que el de frenar ataques terroristas.
Internacionales
Agencias - 2013-12-27
Un juez federal de Nueva York declaró "legal" al programa de recolección de datos telefónicos de la Agencia Nacional de Seguridad estadunidense (NSA, por siglas en inglés), defendiendo su necesidad para combatir el terrorismo.
"El programa de recolección de información telefónica de la NSA es legal", señaló el juez William Pauley en su fallo, que tiene lugar diez días después de que otro magistrado indicase que las actividades de espionaje del gobierno estadunidense eran probablemente inconstitucionales.
"No hay evidencia de que el gobierno haya utilizado la información telefónica recolectada con un propósito diferente del de investigar y frenar ataques terroristas", agrega el magistrado al justificar su decisión.
El fallo de Pauley rechaza así un pedido de la querellante Unión Estadunidense de Libertades Civiles (ACLU, según sus siglas en inglés) para frenar el programa de la NSA.
En su argumentación el magistrado recordó los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York y Washington que dejaron unos 3 mil muertos.
"La tecnología permitió a Al Qaida operar de manera descentralizada y planear a distancia ataques terroristas internacionales", escribió.
"La recolección (de datos) es amplia, pero el alcance de las investigaciones de contraterrorismo no tiene precedentes. Las investigaciones sobre seguridad nacional son fundamentalmente diferentes de las investigaciones criminales. Son a futuro -centradas en prevenir ataques-, opuestas a la investigación retrospectiva de crímenes", explicó.
El programa de la NSA, revelado por el ex analista de inteligencia estadunidense Edward Snowden, incluyó el espionaje de millones de llamadas telefónicas y correos electrónicos en Estados Unidos y el exterior.
La divulgación de las actividades de la NSA provocaron a Estados Unidos roces diplomáticos con varios de sus aliados, entre ellos Alemania, Israel y Brasil.
El presidente estadunidense Barack Obama lamentó el viernes pasado los "daños innecesarios" que causaron las revelaciones de Snowden, asilado de manera temporal en Rusia.
Según responsables de inteligencia, las revelaciones de Snowden han afectado seriamente las operaciones encubiertas contra grupos terroristas, a la vez que han puesto al gobierno de Obama en una posición incómoda internacionalmente.
La semana pasada, un panel de expertos comisionados por la Casa Blanca recomendó reducir el poder de la NSA, advirtiendo que su espionaje masivo ha ido demasiado lejos.
De su lado, y seis meses después de la primera filtración a la prensa sobre el programa de la NSA, Edward Snowden afirmó que su "misión ya está cumplida", porque el público ahora está informado sobre la vigilancia masiva que realiza el gobierno de Estados Unidos