Ofensiva israelí contra Hamas deja más de 100 muertos en Gaza en 4 días
+ El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que "ninguna presión internacional" impedirá a su gobierno "golpear a los terroristas", al referirse a la acción contra Hamas en Gaza, que ...
Internacionales
MILENIO - 2014-07-11
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, declaró hoy que "ninguna presión internacional" impedirá a su país "golpear a los terroristas", al referirse a la ofensiva contra el Hamas en Gaza, que ha dejado más de cien muertos en cuatro días. "Ninguna presión internacional nos impedirá golpear a los terroristas que nos atacan", dijo Netanyahu durante una conferencia de prensa en el ministerio de la Defensa en Tel Aviv.
En una entrevista telefónica anterior con Netanyahu, el presidente estadunidense, Barack Obama, expresó su temor a una escalada de la violencia y ofreció su mediación para restablecer la calma. Estados Unidos está dispuesto a "facilitar un cese de las hostilidades, incluida una vuelta al acuerdo de alto el fuego de noviembre de 2012", añadió la Casa Blanca. Sin embargo, Washington considera al movimiento Hamas una "organización terrorista".
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, había llamado ayer a un alto el fuego en una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad. Sin embargo, tanto Netanyahu como el ex primer ministro de Hamas en Gaza, Ismail Haniye, excluyeron por el momento un alto el fuego. En Gaza, los bombardeos israelíes dejaron hoy al menos diez palestinos muertos, entre ellos, un niño y una mujer, según los servicios de emergencias locales. En total, la operación israelí Protective Edge (Barrera Protectora) se ha saldado hasta el momento con 103 muertos y más de 500 heridos.
Según el ejército israelí, Hamas y la Yihad Islámica, un grupo radical aliado, lanzaron más de 40 cohetes y obuses desde el jueves a medianoche. En total, 426 proyectiles se lanzaron desde Gaza, y 121 otros han sido destruidos en vuelo, desde el inicio de las hostilidades. Una decena de israelíes resultaron heridos, dos de ellos de gravedad, en los últimos días.
El movimiento islamista palestino Hamas, que gobierna la franja de Gaza, reivindicó el lanzamiento de cuatro cohetes de largo alcance M75 contra el aeropuerto internacional Ben Gurión, en la periferia de Tel Aviv, y advirtió a las compañías extranjeras de "los peligros" de aterrizar en Israel. El aeropuerto no resultó impactado peros sus operaciones se interrumpieron durante unos minutos.
Mientras, la aviación y la marina de guerra israelí continuaron con el castigo aéreo sobre supuestas posiciones islamistas en una Franja de calles vacías, donde, según las autoridades, empiezan a escasear las medicinas y los alimentos y donde la elevada cifra de heridos -680- comienza a saturar los hospitales.
Según el último balance castrense israelí, desde la pasada medianoche cazabombarderos y buques han atacado 40 lanzaderas de cohetes, algunas de ellas para proyectiles de largo alcance, diez silos y fábricas de armas y cerca de una treintena de túneles. Además, han disparado misiles contra siete supuestos milicianos islamistas, a los que identificó como responsables del lanzamiento de cohetes.
Fuentes palestinas denunciaron, sin embargo, que también fueron atacadas viviendas civiles, que Israel presenta como centros operativos al habitar en ellas algún dirigente islamista. Cifras de la ONU afirman que los bombardeos han afectado a más de 150 edificios en toda Gaza, y que cerca de un millar de personas se han quedado sin hogar.
A este respecto, la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, denunció hoy la escalada del conflicto y recordó a Israel que viola la ley internacional cuando bombardea áreas pobladas y especialmente viviendas. "Hemos recibido informes muy preocupantes que indican que la mayoría de las víctimas civiles, incluidos niños, ocurrieron como resultados de bombardeos sobre casas. Estos informes levantan muchas sospechas sobre si Israael cumple la ley internacional", dijo Pillay en un comunicado.
El Ejercitó israelí también informó hoy del lanzamiento de cerca de un centenar de cohetes contra el centro y el sur de Israel, una veintena de cuales fueron interceptados por el sistema antimisiles "Iron Dome". Las "brigadas Azedím al Kasem", brazo armado de Hamás, asumieron el disparo de cuatro de esos cohetes contra el principal aeropuerto de Israel, que advirtieron consideran uno de sus objetivos.
Los cohetes, que sobrevolaron la ciudad de Tel Aviv, fueron interceptados por el escudo antimisiles, y el aeródromo siguió con su actividad habitual tras el breve impás que impusieron las sirenas antiaéreas. La llamada "Cúpula de Hierro" no impidió, sin embargo, que un cohete cayera sobre una gasolinera del puerto mediterráneo israelí de Ashdod, y causara heridas a tres civiles, uno de ellos grave.
Este nuevo episodio de violencia comenzó tras el secuestro y asesinato de tres estudiantes israelíes a principios de junio en la Cisjordania ocupada, que Israel atribuye a Hamas, al que le siguió el asesinato de un joven palestino en Jerusalén a manos de judíos de extrema derecha. El enfrentamiento amenaza con expandirse al norte de Israel, donde impactó un cohete lanzado desde Líbano sin causar víctimas.
El ejército israelí, que respondió con un ataque contra la localidad libanesa de Kfar Shuba (sur), excluye que se trate de un ataque del movimiento chiita libanés Hezbolá y presentó una queja ante las fuerzas de Naciones Unidas en Líbano (FINUL). En Jerusalén Este y en los territorios palestinos, la jornada fue relativamente tranquila en este segundo viernes de Ramadán. Por temores a incidentes, la policía israelí permitió únicamente el acceso a doce mil fieles a la Explanada de las Mezquitas.
En Galilea (norte de Israel), unos cuatro mil árabes israelíes se manifestaron cerca de Nazaret contra "los crímenes de guerra israelíes" en Gaza. La aviación israelí lanzó decenas de ataques en la franja de Gaza en las últimas 24 horas contra objetivos vinculados al grupo islamista Hamas, entre ellos, plataformas de lanzamiento de cohetes, túneles, puestos de control u oficinas de las instituciones gubernamentales de Hamas.
Un fotógrafo de la AFP vio varios barcos incendiados en el puerto de Gaza. En el terreno, siguen los preparativos para una eventual ofensiva terrestre. "Los terroristas en Gaza cometieron un grave error al atacar a la población de Israel", repitió el jefe del estado mayor israelí, el general Benny Gantz, quien advirtió que su ejército iba a "ampliar sus actividades según sus necesidades y con las fuerzas necesarias".
"Debemos mirar esta campaña de forma sensata y no histérica. Nada impedirá que sigamos adelante. El Ejército israelí no necesita una gota que colme el vaso para lanzar una operación terrestre, sólo una directriz política", afirmó. El general reiteró que la ofensiva avanza con éxito por la senda marcada, pero que considera que aún no es suficiente para el logro de sus objetivos declarados: detener el lanzamiento de cohetes y destruir la infraestructura del movimiento islamista Hamás.
"Gaza se está sumiendo en el desastre. La ofensiva por aire es excelente y los (esfuerzos) en inteligencia están funcionando", afirmó. Aún así, el gabinete insiste en descartar el alto el fuego que la comunidad internacional demanda -el presidente de EU, Barack Obama, se ha ofrecido incluso a mediar- y mira hacia el perímetro de la aislada y asediada Franja, donde ya tiene apostados miles de soldados y unidades de blindados.
Según la prensa local, solo queda decidir la naturaleza, la fecha y la duración de la misma, aunque hay consenso entre analistas y expertos en que será puntual y limitada.Israel movilizó a 33 mil reservistas con el objetivo de desplegarlos cerca de Gaza. Periodistas de la AFP vieron importantes concentraciones de tropas, de tanques y de cañones de artillería a proximidad del enclave palestino.
El ataque contra Gaza ha provocado la cólera de los vecinos de Israel. Israel "dice que (Hamas) dispara cohetes. Pero, ¿ha muerto alguien?", protestó el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, aliado de Hamas, que acusó a Israel de "mentir".
Egipto, primer país árabe que firmó un tratado de paz con Israel en 1979, criticó "la política de castigo colectivo" de Israel en Gaza y lamentó la "tozudez" de los protagonistas pese a sus esfuerzos desplegados para detener la violencia. Ante el deterioro de la situación en Gaza, 34 asociaciones humanitarias internacionales llamaron hoy a un alto el fuego y a respetar los derechos humanos en el enclave palestino.