Liberación de 53 presos en Cuba refuerza la política de Obama
Con las excarcelaciones, el mandatario de EU demuestra de "lo que puede ser capaz si decide dialogar con La Habana".
Internacionales
MILENIO - 2015-01-13
El presidente Barack Obama se apuntó un logro frente a las voces que critican el cambio de la política de Estados Unidos hacia Cuba al lograr la excarcelación de 53 presos políticos en la isla.
El histórico acuerdo de diciembre entre Washington y La Habana para normalizar sus relaciones diplomáticas comenzó, por tanto, a dar sus primeros frutos con la liberación paulatina de los presos, que inició el pasado miércoles.
El gobierno del presidente Raúl Castro cumplió con su compromiso de liberar a los 53 presos políticos, tal y como prometió hacer no solo a EU, sino también al Vaticano, como recordó la administración de Obama. El papa Francisco actuó el año pasado como mediador en el acuerdo entre ambos países.
La Casa Blanca sostuvo, además, que la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana corroboró que los presos sí fueron excarcelados en la isla.
El gobierno cubano, como suele ser habitual, no había confirmado las liberaciones. Y la disidencia cubana solo ratificó a su vez la excarcelación de 38 presos políticos la semana pasada.
#CubaNow, una organización con sede en Miami liderada por jóvenes cubano-estadunidenses, consideró que su puesta en libertad demuestra que la nueva política hacia la isla anunciada por Obama en diciembre es "más eficaz" que la ley Helms-Burton, que en 1996 endureció el embargo contra la isla.
El director ejecutivo de #CubaNow, Ric Herrero, indicó que las excarcelaciones ponen de manifiesto lo que puede lograr el gobierno de Estados Unidos si decide dialogar con La Habana. "En cambio, el número de prisioneros políticos liberados gracias a los esfuerzos estadunidenses de dos décadas de ley Helms-Burton ha sido cero", enfatizó.
Esta organización del exilio, favorable a una mayor flexibilización de la política hacia la isla, instó al Congreso a "tomar nota y explorar nuevas maneras de incentivar las reformas políticas y el respecto de los derechos humanos en Cuba".
Herrero criticó a aquellos congresistas y senadores quienes insisten en mantener el "estatu quo bajo la fallida ley Helms-Burton", pues consideró que con ello están haciendo un débil servicio a aquellos cuyos derechos "son pisoteados a diario ante el pretexto que la ley Helms-Burton da a las autoridades cubanas".
Congresistas y senadores de ambos partidos critican el cambio de la política estadunidense hacia Cuba en contrapartida, según ellos, de nada. Varios legisladores, en especial los de origen cubano, se oponen a cualquier concesión a los hermanos Raúl y Fidel Castro y al levantamiento del embargo.
El senador republicano Marco Rubio aplaudió la excarcelación de los 53 presos políticos pero recordó que "miles siguen en la cárcel".
"Nos olvidamos que en los dos últimos años el gobierno cubano arrestó a miles de personas", dijo Rubio en una entrevista con la cadena de televisión CBS, y lamentó que a cambio de ese pequeño gesto los funcionarios del gobierno castrista "están consiguiendo prácticamente todo lo que quieren de la administración de Barack Obama".
Los nombres de los 53 presos liberados estaban en una lista que Washington elaboró en solitario y entregó a La Habana durante las conversaciones secretas que condujeron al anuncio del 17 de diciembre, de que ambos países retomarán sus vínculos diplomáticos tras medio siglo de enfrentamientos y rupturas.
La lista, que no incluye a ningún disidente reconocido fuera de Cuba, fue hecha pública ayer por las oficinas de diversos legisladores en Washington, acompañado de una carta firmada por el Departamento de Estado, John Kerry.
El presidente estadunidense tiene prevista la apertura de una embajada de Washington en La Habana.
Además, encargó a Kerry que iniciara el proceso para revisar la presencia de Cuba en la lista que elabora Washington sobre los Estados patrocinadores de terrorismo y a la cual la isla pertenece desde 1982.
Obama también anunció una serie de medidas económicas destinadas a facilitar el envío de remesas y los viajes desde territorio estadunidense a la isla.
Pero estos cambios no suponen el levantamiento del embargo económico y comercial a Cuba, ya que solo el Congreso de Estados Unidos puede aprobar esa medida.