Venezuela, entre un futuro democrático o uno autoritario
En una entrevista telefónica con EL UNIVERSAL, Antonio Ledezma, alcalde mayor de Caracas, dice que el país viene arrastrando “una crisis institucional ahora transformada en una crisis general”
Internacionales
- 2011-06-25
Es uno de los tres aspirantes a la presidencia en las elecciones primarias que la oposición pauta para elegir un candidato único en las esperadas elecciones de 2012. Antonio Ledezma, alcalde mayor de Caracas, tiene 56 años y una larga militancia en Acción Democrática (AD), el partido del finado ex presidente Carlos Andrés Pérez (1974-1979 y 1989-1993).
En una entrevista telefónica con EL UNIVERSAL dice que el país viene arrastrando “una crisis institucional ahora transformada en una crisis general”, fruto de los cortes energéticos, la falta de vivienda y la creciente inflación, entre otros problemas, como el colapso del sistema carcelario. Ledezma opina que todo es fruto de la improvisación y del estilo autoritario del gobierno de Hugo Chávez, a quien le reclama información “fidedigna y urgente sobre su estado de salud” porque “eso le interesa a todos los venezolanos, sea del color político que sea”. Descarta representar, como aspirante a la presidencia, “el pasado” y, vencedor en Caracas en los comicios de 2008 y 2010, dice que ya sabe “cómo se le gana a Chávez”
Usted siempre habló de que el país arrastraba una crisis institucional, fruto del control que sobre las instituciones ejercía el gobierno. ¿Cúal es el estado actual de esa crisis?
Hoy hay condiciones de una crisis general. Las instituciones siguen en crisis, sumado a un problema económico que se agrava con la inflación, con bajas tasas de crecimiento económico (las menores del América Latina), el colapso del sistema energético y otros problemas que se vienen suscitando. Como si fuera poco, no sabemos qué le pasa al presidente porque las informaciones son contradictorias y no se maneja el asunto con la transparencia y seriedad necesarias.
En otros países, cuando un presidente está en un hospital atravesando el postoperatorio, se emite un parte médico diario. ¿Por qué este no es el caso?
Es que se maneja esto como algo mítico. Ellos mismos le asignan al presidente algo sobrenatural. Como si un ser humano no tuviese derecho a enfermarse.
En un contexto de cortes de suministro energético que enojan a la población, los refugiados de las lluvias aún esperando soluciones y la baja del consumo en los último meses, ¿se podría decir que el gobierno de Chávez atraviesa una coyuntura de las más complejas en los últimos años?
Creo que es el peor momento para los venezolanos que sufren el embate de la inseguridad que crece en el país, los apagones. Sumado a la inestabilidad permanente y la falta de gobernabilidad, termina haciéndole un grave daño al país.
Cuando se analizó el por qué de la crisis energética y la oposición acusó al gobierno de no haber realizado las inversiones y denunció la falta de mantenimiento de las redes, la administración denunció un intento de sabotaje. ¿Usted cree que hay espacio para un sabotaje?
En todo caso, es un autosabotaje. Los primeros que se sabotean son el presidente y sus ministros, el gobierno y su cadena de improvisaciones.
El tema de la vivienda, con decenas de miles de afectados viviendo en refugios, aún está en la agenda como el primero a resolver este año por el gobierno. Al menos existe la promesa de construir decenas de miles de casas para esos damnificados. ¿Cuál es su postura al respecto?
Las casas no se hacen por arte de magia. Eso es imposible. El gobierno no va a hacer en 12 meses lo que no pudo hacer en 12 años.
Este es el gobierno que ha construido menos viviendas de toda la era democrática venezolana. Eso, a pesar de haber tenido muchos mayores ingresos y mayor tiempo en el poder.
A esto yo lo defino como una conjunción perfecta de ineptitud y de corrupción. Aquí hay terrenos de sobra, pero no hay para producir cemento o varas para la construcción, por ejemplo. No sabemos cómo le hará para poder cumplir.
La oposición llega hasta aquí unificada después de muchos años de desencuentros permanentes
Costó, pero valió la pena.
¿Ya es precandidato a la presidencia?
Sí. Estamos luchando por eso.
No teme que, al haber sido funcionario en un gobierno (el segundo de Carlos Andrés Pérez) de la IV República, lo involucren con ese pasado el gobierno suele satanizar?
Pero si yo soy más joven que Chávez. Además, yo vivo mirando al futuro, con un programa de gobierno para modernizar a Venezuela.
Lo decía por el resto de sus competidores en la oposición. Es que el gobernador de Miranda, Henrique Capriles Radonski, o el ex alcalde de Chaca, Leopoldo López, se arrogan la representación de lo nuevo, también por una cuestión generacional.
Mire, ellos, tanto como yo, también formaron parte de ese pasado.
Capriles, por ejemplo, fue diputado, Pablo Pérez militó conmigo en la juventud de AD. O sea que todos tenemos una historia en ese pasado que Chávez sataniza.
Lo que es importante entender aquí es que en las elecciones de 2012 lo que estará en juego será: una Venezuela democrática, la que nosotros proponemos contra una Venezuela, como la actual, autoritaria e ineficiente por donde se la mire.