OAXACA BRAVO Y VERACRUZ APOYA
Columna Sin Nombre
@pablojair
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Pablo Jair Ortega
Columna sin nombre
2016-06-21
En Coatepec, el ex candidato del PRI a la gubernatura, Héctor Yunes Landa, tuvo una reunión junto a su equipo de campaña y colaboradores cercanos. Ahí anunció que regresará al Senado de la República y también realizará una gira por el estado para agradecerle a los veracruzanos su votación.
Deja entrever que estará participando como actor político en las próximas elecciones municipales del 2017 (ya a la vuelta de la esquina) y para la gubernatura en el 2018 (tampoco muy lejano).
También dio a conocer que sostendrá un reunión este martes con el otro senador, el otro Yunes, el peroteño, quien ya se anda destapando pero no le cae el veinte de que la tiene difícil y está lejos de ser el semidiós que pueda rescatar al tricolor de la ignominia.
Y es que mientras anda promoviéndose, no ha explicado --por ejemplo-- qué pasará con el partido en Veracruz: ¿quién lo sostendrá? ¿quién pagará la nómina? ¿de dónde saldrán recursos para sostener esa estructura de delegados, operadores, líderes seccionales? A estas alturas cualquiera puede destaparse para la gubernatura y vestirse de superhéroe, pero la realidad es que importa más el cómo que el quién.
Se dice que al PRI llegaría Américo Zúñiga, actual alcalde de Xalapa y muy cercano al senador Pepe… Sí, la capital donde el PRI no gana desde hace rato y Morena ha crecido en simpatía. Ese centralismo que no cambia como uno de los vicios favoritos del PRI.
Lo que no se duda es que Héctor haga valer su palabra de caballero y apoye a quien el partido designe para tomar las riendas e incluso para trabajar en el 2017 y 2018. El proyecto original era por 8 años, pero la situación no resultó favorable para el PRI. Tampoco se descarte que sea Yunes Landa mismo quien vuelva a competir por la gubernatura en el 2018.
Este lunes, también renunció el dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones Rivera, a quien se le estaba agenciando la derrota del tricolor en las pasadas elecciones; la secretaria general Carolina Monroy será la presidenta interina. Agustín Basave, dirigente nacional del PRD, también renuncia y en su carta reitera que no pertenece a ninguna de las tribus o grupos internos que buscan apoderarse del control total del sol azteca; que regresará a la Cámara de Diputados a sus actividades legislativas.
Mientras tanto, Oaxaca se vuelve a convertir en zona de enfrentamientos entre simpatizantes de la CNTE y la Policía Federal; se ven imágenes fuertes como las del 2006, cuando en ese entonces se enfrentaron a la APPO (Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca), que también inició desmanes precisamente por apoyar a profesores. El sector magisterial en esta ocasión tiene el respaldo del partido Movimiento Regeneración Nacional (MORENA), liderado por Andrés Manuel López Obrador.
En ese entonces, reportes periodísticos llegaron a contabilizar un total de 17 muertos y alrededor de cuarenta detenidos, como resultado de los enfrentamientos con la Policía Federal. También se aplazaron las clases por el conflicto magisterial que se acrecentó por las organizaciones sociales que integraron la APPO.
Oaxaca ha sido escenario de conflictos, especialmente por la combativa sección 22 de la CNTE. No es para menos: es uno de los lugares donde se vive más el rezago social, donde los cacicazgos imperan, territorio fértil para el tráfico de drogas en su frontera con Veracruz; también es de los más bravos: se dice que la escolta personal de Porfirio Díaz era precisamente integrada por juchitecos.
Mucho se ha dicho que la apuesta de López Obrador por la CNTE es sobrevalorada e incluso arriesgada para su candidatura a la Presidencia en 2018, pero al menos en Veracruz hubo varias protestas en el estado en apoyo para el magisterio, así como un fuerte apoyo de grupos intelectuales a nivel nacional (los mismos, pues: actores, escritores, poetas, etc.)
Tampoco se puede dejar de mencionar que en Xalapa hubo sendas manifestaciones y bloqueos por parte de maestros en varios puntos de la entidad en 2013, cuando llegaron incluso a tomar las instalaciones de la Sección 32 del Sindicato Nacional de Trabajadores del Estado (SNTE). Algunas de estas protestas fueron numerosas y se habló de la presencia de gente de otros estados quienes llegaron a azuzar a maestros veracruzanos para iniciar algo así como una “revolución”. En ese entonces, ya se hablaba de que se iba a “oaxaqueñizar” la educación en Veracruz.
Al final, lo que se conformó como Movimiento Magisterial Popular Veracruzano, perdió gas, pero es muy posible que vuelva a retomar fuerza.
Al menos ya en Xalapa se dio a conocer la cancelación de corridas por parte de los autobuses ADO hacia Oaxaca.
Lo dicho: el magisterio no está totalmente contento con las reformas educativas implementadas por el gobierno federal, y este lunes hasta trascendió que al menos 200 maestros tendrán que repetir la prueba por un error del sistema de evaluación.
Por algo López Obrador apoya al magisterio. Hay mucha inconformidad en ese sector y las elecciones locales están muy cerca para pensar en heroísmos futuristas.