Encuestas: trajes de la medida
“¿Qué derecho tiene un señor o señora de creer que por escribir una columna tenemos que creer que es verdad lo que dice?”.
José Saramago
Atanasio Hernández
CONTRACOLUMNA
2020-05-04
No son periodistas, aunque algunos navegan con esa bandera. Tampoco empresarios en sentido estricto, porque lo que producen vale muy poco, ni defraudadores o ladrones, pues su actividad es legal. Se trata de “vivales” que lucran con la política y con base en publicaciones y encuestas venden “caricias” al ego de presidentes municipales y gobernadores: mercenarios que ofrecen “medallitas” u otros premios a su supuesto desempeño, popularidad y honestidad a cambio de dinero, vía publicidad u otros servicios.
Estos negocios, aislados o en alianza con otros dedicados a los estudios de opinión, han florecido en el país durante los últimos 15 años. Ejemplo de ello es la revista C&E Campaigns & Elections México, cuyo editor para América Latina es Alejandro Salvador Rodríguez Ayala, a través de AR Asesores y Ediciones, SA de CV, de acuerdo con su página ceonline.com.mx
El nombre rimbombante y frases que impresionan a los provincianos, como “political junkies”, no son más que un contrato de licencia con la empresa gringa Political World Communications LLC, propietaria de la marca internacional que regentea esta revista, que se presenta como la “más destacada en el mundo de la comunicación política”, con ediciones en Estados Unidos, Canadá y México.
Durante el último año ha difundido cuatro “rankings” de gobernadores y presidentes municipales, de la mano con la casa encuestadora Varela y Asociados, a la que le bastan 400 entrevistas telefónicas por municipio para otorgar una calificación al gobernante en turno. No importa si se trata de Tijuana, Baja California, donde viven 1.64 millones de personas, o la capital de Guanajuato, con menos de 200 mil habitantes. Su fórmula “matemágica” –dicen–, tiene una confiabilidad de 96 por ciento.
Así, en sus cuatro rankings han aparecido entre los primeros diez los/las presidentes municipales de León, Guanajuato; Mérida, Yucatán; Guadalupe, Nuevo León; Querétaro, Querétaro, y Aguascalientes, Aguascalientes. En tres, Huixquilucan, Estado de México; Colima, Colima, y Saltillo, Coahuila, y en uno, Reynosa, Tamaulipas, y Corregidora, Querétaro. Todos ellos, excepto dos, del Partido Acción Nacional (PAN).
Esto cobra importancia porque en 2018 Carlo Ángel Varela Maldonado, representante legal de Varela y Asociados, SA de CV, firmó con el PAN un contrato por 3.96 millones de pesos, para levantar encuestas de salida y hacer un conteo rápido nacional durante la jornada electoral del 1 de julio. Un año antes hizo lo mismo en las votaciones municipales de Veracruz, por 900 mil pesos más IVA.
De vuelta a las publicaciones de Campaigns & Elections México, el 11 de noviembre de 2016 –antes de su romance electoral con el Partido de la Revolución Democrática (PRD)– el PAN y luego el Partido Revolucionario Institucional (PRI) presentaron ante el Instituto Nacional Electoral (INE) quejas contra el entonces gobernador de Morelos, Graco Luis Ramírez Garrido Abreu y otros, por uso indebido de recursos públicos y promoción personalizada fuera de la temporalidad y territorialidad en la que ejercía su función, así como actos anticipados de campaña.
Graco quería ser candidato del PRD a la Presidencia de la República en 2018 y apareció en “close up” en la portada de la revista bajo el título “Graco Ramírez transforma Morelos”, con un reportaje interior amplio. No sólo eso. El “servicio” incluía anuncios espectaculares y en autobuses del transporte público en 21 ciudades de 19 estados.
El asunto llevó al Juicio Electoral SRE-JE-16/2017 y el 24 de agosto se emplazó a una audiencia de pruebas y alegatos. Nada pasó. El Gobernador mandó a un galavardo para alegar que la entrevista fue gratuita; Alejandro Salvador Rodríguez Ayala dijo que contrató la publicidad con Media Design Latinoamérica, SA de CV como estrategia de comunicación, y ésta, a su vez, se amparó en los servicios de publicidad, transmisión y difusión brindados.
Pero salió a la luz que la revista, inscrita en el Padrón de Medios Impresos de la Secretaría de Gobernación, tenía un tiraje de mil 109 ejemplares: en promedio, 252 de circulación pagada y 857 gratuitos. Nada, si tomamos en cuenta que anuncian pomposamente su venta en las tiendas Sanborns, que en 2018 eran 167 en el país. El resto del tiraje, suponemos, se diluye con los ejemplares entregados al cliente que aparece en la portada, a cambio de los muchos miles invertidos.
En el caso de los gobernantes que lideran los rankings, el primer comentario de Twitter que aparece en la página ceonline.com.mx corresponde al presidente nacional del PAN, Marko Cortés, para quien “Está muy claro: donde gobierna @AccionNacional se gobierna mejor y la gente lo sabe”.
Pero el asunto, lejos de eso, se relaciona con los dineros. La última edición de la revista incluye publicidad de Guadalupe, Nuevo León, uno de los municipios consentidos. También, del Gobierno del estado de Querétaro, cuyo titular aparece en segundo lugar en el último “Ranking de Gobernadores”, y hay un nuevo cliente o adquisición: el presidente municipal de Corregidora, Querétaro, quien ocupa la posición diez en su categoría.
Esa medición –consigna la revista– considera las 55 ciudades más importantes de México por indice poblacional y manejo de recursos económicos. Aunque de acuerdo con datos oficiales, todo el municipio de Corregidora, Querétaro, tenga 143 mil habitantes. Como el presidente municipal Roberto Sosa Pichardo busca reelegirse, también compró su espejito.
Según Campaigns & Elections México, cada año otorgan premios para la consultoría política: “Reed Awards, Reed Awards Latino (conocidos como los Óscares de la política) y los Rising Star, para las mejores piezas comunicación política en sus diversos formatos”. Puras ilusiones...
De la mano con los encuestadores, estos “empresarios” ofertan a los políticos publicidad, sitios web, consultoría, mediciones de todo tipo, investigaciones de mercado y consumo, lavado, planchado y hasta mole y tamales los domingos. Más de uno les cree la broma.