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Prefacio.
A menos que las corporaciones policiacas se intercambien los uniformes, que usen de manera aleatoria chalecos antibalas de diversos grupos. * Sólo así se puede entender lo que afirma el gobernador de Veracruz: que la agresión a periodistas en Boca del Río fue por parte de elementos de la corporación municipal. * Los videos de dicha agresión son muy claros (¿dirán ahora que se modificaron con Inteligencia Artificial?) y muestran a elementos uniformados con los emblemas de la policía estatal, que atacan sin justificación alguna a los comunicadores. * Luego de la agresión a los comunicadores, la secretaría de Seguridad Pública (SSP) hizo circular en sus redes sociales un comunicado en el que aseguraba que ningún elemento de esa dependencia había agredido a periodistas, y que lo que circulaba era una “fake news”. * Este martes, abordado a su llegada a las obras del estadio Luis “Pirata” Fuentes, el gobernador aseguró que “se hizo una investigación” sobre lo sucedido. * “Ya corresponde a la instancia municipal de Veracruz, que tome cartas en el asunto y de todas maneras está denunciado y que todos respondan de acuerdo a su responsabilidad, que la Fiscalía lo atienda”, dijo Poncio Pilatos. Perdón, Cuitláhuac García.
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La soberbia del gobernador de Veracruz es -para utilizar sus propias palabras- “como nunca se había visto en alguien en ese rango de poder. Desde su miope visión, las madres que integran los grupos de búsqueda de personas desaparecidas son unas ingratas, al salir a la calle y exigirle más apoyo, cuando “nunca” se les había atendido como ahora.
Cuitláhuac García revisó con displicencia su agenda y les mandó decir a las madres integradas en esos colectivos que no tenia tiempo para atenderlas y que, si de plano se empeñaban en tener una reunión con él, trataría de abrir un hueco en sus múltiples actividades… el 24 de noviembre.
Pero, incluso aunque las reciba dentro de 17 días, les aclara que el encuentro no tiene razón de ser (ni los plantones, ni los bloqueos) porque durante su administración han aumentado los recursos para la Comisión Estatal de Atención a Víctimas, así como a la Comisión Estatal de Búsqueda, lo que -apuntó- ha permitido la contratación de más personal especializado, pero -además- que se han dado más recursos a los familiares de las víctimas.
Los colectivos de búsqueda de personas desaparecidas tienen otra opinión sobre el tema. Aseguran que el gobernador se ha negado a “darles la cara” y no muestra el menor interés en sus demandas. Le recuerdan que cuando fue candidato a la gubernatura las utilizó como bandera política para ganar simpatías y votos en el año 2018.
Le exigen que cumpla con el compromiso de sostener una reunión de trabajo con todas las personas que se encuentran protestando afuera de Palacio de Gobierno.
“Así como está aclarando esto, así queremos que nos dé respuesta de nuestros desaparecidos, porque mi desaparecido está doblemente desaparecido, (tanto) por la Fiscalía (como por Servicios) Periciales, porque no me saben decir en qué lugar del panteón Palo Verde (de Xalapa) está. Ya son 11 años”, le recriminó una de las madres.
Contrario a lo que piensa el gobernador, no se trata de una movilización promovida por grupos políticos de oposición. Son más de 30 colectivos de búsqueda de personas de distintas partes de la entidad que, en espera de respuestas y acciones del gobierno, durmieron en casas de campaña -algunos a la intemperie- para exigir una reunión con el gobernador y con la titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Verónica Hernández.
En respuesta a las cifras con las que el gobernador pretendió justificar su labor en ese tema, la señora Belén González, de un colectivo de búsqueda de Coatzacoalcos, aseguró que Veracruz “está lleno de fosas clandestinas” y que (las autoridades) saben que están, saben que hay restos y no se han puesto a trabajar”.
Está claro que el gobernador se siente incómodo cuando dialoga con las integrantes de estos grupos. Sabe que les ha fallado, tiene claro que las cifras de desaparecidos en Veracruz, en lugar de disminuir, ha ido al alza y también sabe que ese discurso de su toma de posesión, cuando pidió que la entidad se declarara como prioridad la búsqueda de los desaparecidos.
Pero esa es su responsabilidad, eso es lo que le toca como gobernador de Veracruz. Si le resulta molesto, que se dedique a dar clases.
* Ya avanzada la tarde de este martes, se supo que el gobernador aceptó sostener una reunión con los colectivos el próximo jueves, por lo que estas organizaciones levantaron los bloqueos que mantenían en el centro de Xalapa.
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Epílogo.
El mensaje de la auditora general del Órgano de Fiscalización Superior (Orfis), Delia González Cobos, fue muy claro: advirtió que los recursos públicos no pueden ser usados para campañas políticas, pues las consecuencias y sanciones son de índole penal. * “Estamos inmersos ya en el proceso electoral y seguramente conocen ustedes algún candidato o candidata que vaya a participar. El caso es que los recursos públicos no pueden ser utilizados en campañas y esa es una alerta que venimos a darles el día de hoy”. * Quizá el llamado llegó un poco tarde, pues es muy sabido que algunos de los aspirantes de Morena a la candidatura por el gobierno estatal, han recargado en los alcaldes la tarea de promover su imagen, lo que seguramente no salió de su bolsillo. * La violencia e inseguridad siguen sin freno en Veracruz. La madrugada de este martes tres personas (entre ellas un menor de edad) fueron asesinadas en la cabecera municipal de Gutiérrez Zamora. * Una primera agresión ocurrió en la colonia Las Palmas, a un costado de la carretera federal Poza Rica-Cardel, en su tramo entre Papantla y Gutiérrez Zamora. A ese punto llegaron sujetos desconocidos, quienes persiguieron y dispararon hasta dar muerte a un joven identificado como Iván “N”, estudiante del CBTIS. Ahí mismo asesinaron a Omar “N”, de 22 años. * Minutos más tarde, sujetos desconocidos ejecutaron a otra persona del sexo masculino en la localidad Ojite de Matamoros, donde fue localizado el cuerpo sin vida con múltiples disparos de arma de fuego. La víctima conducía un automóvil Nissan, Tsuru, que está habilitado como taxi con el número económico 12. * ¿Hasta cuándo pondrán orden?
