TIHUATLÁN: Se desborda el río Totolapa

Debido a las consecuencias de las torrenciales lluvias por la tormenta tropical número ocho, que inundó las casas de al menos 30 familias en las localidades de Cantarranas y El Vado, pertenecientes a este municipio, ahora vecinos de Totolapa, pasaron momentos de angustia y temor por el desbordamiento del río del mismo nombre, según datos proporcionados por la señora Teresa Rodríguez, quien tiene su domicilio en la calle Xicoténcatl, sin número, dedicada a la venta de fruta y quien resultó afectada en esta inundación.

Dijo que la lluvia cayó durante gran parte de la noche y que el nivel del río comenzó a subir alrededor de las 06: 00 horas del domingo, cuando se preparaba para salir a realizar su venta, al centro de Plan de Ayala, en ese instante pudo percatarse de que el agua se había introducido a su vivienda, echando a perder sus pertenencias que con tanto esfuerzo había logrado comprar.

“De manera apresurada, como pude, saqué algunas cosas, mientras otras las coloqué en un lugar fuera del alcance del agua, puse a salvo a mi familia y no pudimos dormir por el miedo a morir ahogados”, puntualizó.

Teresa Rodríguez, afirmó ser madre soltera y tener a su cargo, el cuidado de tres hijos, y que las pocas cosas que ha logrado conseguir ha sido a base de esfuerzo y sacrificio, por lo que lamenta perder sus pertenencias cada vez que se desborda el río.

A escasos metros de esta vivienda habita otra familia que también resultó ser afectada, se trata de Silvia Juárez, comerciante y madre de familia de cuatro hijos, explicó que ya son varias las ocasiones que sufren pérdidas, pero que hasta el momento sólo han sido materiales, pero que debido al bajo nivel del suelo con respecto al río que pasa a unos 10 metros, este siempre es una amenaza para los habitantes de esta zona, pero que ellas siempre han sido las afectadas directas con las crecientes del Totolapa.

Cabe destacar que año con año, estas dos familias padecen siempre esta situación, según datos de vecinos de este lugar, sin embargo, debido a las constantes lluvias que todavía faltan por venir, también existe el riesgo de que familias del Vado y Cantarranas estén pasando las mismas condiciones por la creciente del río Cazones, que en esta temporada siempre suben sus niveles.

“De manera apresurada, como pude, saqué algunas cosas, mientras otras las coloqué en un lugar fuera del alcance del agua, puse a salvo a mi familia y no pudimos dormir por el miedo a morir ahogados”.
Teresa Rodríguez, habitante de Totolapa.