+ Acusa Procuraduría a la Secretaría de encubrir a agentes involucrados en el ataque a diplomáticos de EU
Nacionales
REFORMA.COM - 2012-11-19
La PGR puso en evidencia las mentiras de la Secretaría de Seguridad Pública, que encabeza Genaro García Luna.
La subprocuradora Victoria Pacheco Jiménez detalló en conferencia la serie de mentiras y encubrimientos de la SSP para favorecer a los oficiales de la Policía Federal que dispararon contra agentes de la CIA y un marino el 24 de agosto.
De entrada, la Procuraduría aseguró que funcionarios de la División de Seguridad Regional instruyeron a los 14 agentes federales que participaron en el ataque para que se presentaran a declarar ante el MP uniformados y con vehículos de la corporación.
Esto, pese a que, cuando dispararon contra la camioneta Land Toyota Crusier con placas diplomáticas BCM 242, iban vestidos de civiles y a bordo de vehículos particulares, según consta en videos de la CFE, Caminos y Puentes Federales y la Cruz Blanca, así como fotos de los propios teléfonos de los agentes.
Según la titular de la Subprocuraduría de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo, en sus primeras declaraciones ministeriales los agentes federales atendieron las indicaciones de sus jefes para mentir y manifestaron que iban uniformados y en patrullas balizadas.
Además, aseguraron que indagaban el secuestro de un funcionario y que dispararon para repeler una agresión.
Al respecto, la PGR descartó la supuesta investigación del secuestro, pues, si bien existió, éste era indagado por la Procuraduría de Morelos, no por la PF.
La PGR dio a conocer que la SSP federal no documentó que alguna Procuraduría estatal solicitara formalmente su colaboración, para justificar que un grupo de federales estuvieran en Tres Marías para indagar el plagio de un funcionario del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Se trata del caso de Salvador Vidal Flores Pérez, quien el 23 de agosto por la mañana fue interceptado cuando salió de Tepoztlán y por quien sus plagiarios aparentemente pidieron 200 mil pesos.
De este caso, supuestamente tuvo conocimiento la Procuraduría del DF.
La subprocuradora de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo dijo que el plagio fue denunciado, sin embargo, añadió que no hay pruebas de que los agentes federales efectivamente estuvieran al cargo de su pesquisa.
"El día 23 (de agosto) efectivamente existe el evento al que hacen referencia, pero objetivamente nada tiene que ver con la investigación, es un asunto que se trata o es investigado por el fuero común, no corresponde al fuero federal, no estaba asignada la investigación, no había colaboración para que la autoridad federal realizara esa investigación; es decir, no tiene relación con los hechos que investigamos", señaló.
Además, Pacheco Jiménez indicó que, según pruebas periciales y científicas, la totalidad de los casquillos hallados en el lugar del ataque corresponden a armas de la Policía Federal, por lo que no hay elementos que avalen la versión de que los oficiales repelían un ataque de los agentes diplomáticos.
En el lugar de los hechos, dijo, sólo se encontraron casquillos de 15 armas de fuego, de las 24 que portaban los agentes de la Policía Federal. De las armas disparadas contra los estadounidenses y el Capitán de la Armada, 12 eran largas y 3 cortas, de acuerdo con los peritajes de la Procuraduría.
"La totalidad de los casquillos levantados en el lugar del evento delictivo corresponden a las armas de la Policía Federal, es decir, no hay un indicio que demuestre que hubo disparos de armas diferentes a las de la Policía Federal", sostuvo la subprocuradora.
Contra la camioneta Land Toyota Cruiser, con placas diplomáticas BCM 242, se hicieron 152 disparos, de los cuales el 40 por ciento se impactaron contra las partes del vehículo que eran más factibles de vulnerar en su blindaje, de acuerdo con los peritajes oficiales.
Este fue el motivo por el que la PGR consignó a los agentes por el delito de homicidio calificado en grado de tentativa, el único delito que les imputaron como grave y que tiene en la cárcel a 14 de los indiciados, sin derecho a la libertad provisional bajo caución.
"Los impactos por arma de fuego que recibió el vehículo fueron en su mayor parte en los cristales, que es la parte más vulnerable del blindaje y así tenemos que (la camioneta) recibió el 40 por ciento de los disparos en las ventanillas de piloto y copiloto.
"En sus costados recibió el 15 por ciento de los impactos; en la parte de enfrente del vehículo recibió el 19 por ciento de los impactos y en la parte posterior, en el medallón, 19 por ciento y 19 por ciento en la parte trasera de la tapa".
La subprocuradora también reveló que un juez federal instruyó la aprehensión de cinco mandos policiacos, órdenes que envió a la Secretaría para que ésta los detuviera. Sin embargo, sólo uno fue aprehendido: el inspector general Juan Manuel Pacheco Salgado.
Como resultado, los otros mandos obtuvieron un amparo, con lo que suspendieron el mandato judicial, lo que implica que ya no pisarán la cárcel, pues el delito que les atribuyen no es grave.
Al mismo tiempo, dijo que la PGR solicitó a la SSP entregar los vehículos particulares de los agentes involucrados en los hechos, petición que la Secretaría tardó un mes en atender.
Días antes de ser encarcelados, los agentes arraigados entregaron una declaración escrita a la PGR donde admiten que mintieron desde el principio y que sus mandos les ordenaron falsear los hechos ante el MP, por lo que se procedió contra estos últimos.
Pacheco Jiménez también confirmó que, desde Estados Unidos, los agentes implicados rindieron su declaración ministerial ante la PGR, a través de una solicitud de asistencia consular, por lo que sus testimonios se recabaron y fueron integrados debidamente en la indagatoria.
Ambos empleados de la Embajada resultaron heridos luego del ataque del 24 de agosto. El capitán de la Marina que se trasladaba con ellos rumbo a un campo de tiro de la Armada en el cerro de El Capulín salió ileso.