Parece que las preferencias “mercantiles” del actual alcalde seguirán creando inconformidad en las gentes que durante años han realizado actividades comerciales en la vía pública de nuestra ciudad.
No es que seamos partidarios de que se ejerzan actividades en la vía pública, sino que desde siempre hemos convivido con ese tipo de actividades, PRECISAMENTE PERMITIDOS POR LA AUTORIDAD MUNICIPAL, que ya se nos hizo costumbre.
En este tenor, es el trato que se dispensa a los vendedores de revistas y periódicos de la Asociación de Voceadores de Minatitlán 2003, A. C., que argumentan que ejercen el comercio en la vía pública, específicamente en el malecón de nuestra ciudad, desde hace más de veinte años, exhibiendo documentación al ayuntamiento para acreditar su derecho a continuar en las mismas condiciones en busca del sustento diario para sus familias.
Relatan que con “la modernización” del parque Independencia efectuada en el actual ejercicio del ayuntamiento, fueron desalojados de esa área tres expendios de revistas y periódicos, con la promesa de reintegrarlos a sus sitios originales una vez concluidas las labores de remodelación, sin que hasta la fecha se les haya restituido de tal derecho, alegando la autoridad lo obsoleto de las instalaciones que ocupan.
Y aquí es donde se aprecia que se aplica la “Ley del embudo”, porque en un afán demagógico y de poco alcance, incluso riesgoso e insalubre, el ayuntamiento se aventó la puntada de promover el establecimiento de “Los Portales de Minatitlán”, que no es más que neveras, refrigeradores, mesas y sillas, y carpas al aire libre, que dan un deprimente aspecto al parque Independencia y a sus alrededores y pintan a Minatitlán como un pueblo “bicicletero”.
También se aplica la “Ley del Embudo”, porque el actual ayuntamiento permite el funcionamiento de una taquería –pegado a la barda del jardín de niños Enriqueta Camarillo- en la contra esquina de la iglesia de Cristo Rey, en la colonia Nueva Tacoteno, que funciona desde el anochecer, casi todos los días de la semana, cuando, si quería favorecer a alguien lo hubiera autorizado en el área que ocupó anteriormente el parquecito del DIF, en la misma área.
Y en aras de la “modernización” del comercio de Minatitlán, el ayuntamiento de Minatitlán, permite que se expendan cocos en plena banqueta, casi a la salida del mercado Santa Clara, frente a la ferretería Goyo, cuando de sobra es conocido que en el interior del mercado existen locales sin ocupar.
Y para no ir más lejos, fue el ayuntamiento que preside Leopoldo Torres García, quien redujo la calle Iturbide, en pleno centro comercial para “abrir un espacio moderno de comercialización”, el esquitómetro, para que esquiteros y jotdoqueros, expendan sus productos en plena vía pública.
Y qué me dicen de los que “reubicó” en la calle 5 de Febrero, cuando los desalojó del parque Independencia, que al no vender nada, por iniciativa propia se ubicaron en la calle Lerdo.
¿Le seguimos con los ejemplos?
Y mire lo que son las cosas, en la circular que les enviaron a los voceadores, cuatro en el malecón, que no es parte de un procedimiento de desalojo sino una “invitación”, se les amenaza con multarlos si no desocupan parte de las banquetas que ocupan en la calle Francisco I. Madero; que en justicia, para ser parejos, también debe asignarles un espacio en otro lugar de la vía pública para compensar su reubicación, como lo hizo con los que venden esquites y jotdogs.
Y alude el ayuntamiento al Artículo 83, Fracción I., y al Artículo 84 del Bando de Policía y Buen Gobierno del municipio de Minatitlán, para ejercer la presión de desalojo de esos espacios públicos. Se transcriben los textos:
“ARTICULO 83, Fracción I. Los particulares que tengan establecimientos de servicio público, no podrán: I.- Utilizar la vía pública o lugares no autorizados para realizar actividad comercial o mercantil.
ARTICULO 84. Las personas en ejercicio de sus actividades comerciales, industriales o profesionales, no podrán invadir o estorbar bienes de dominio público”.
Habría que preguntarse si estas disposiciones del Bando de Policía y Buen Gobierno también son aplicables a la intención de construir un Oxxo en pleno parque Independencia, como es pretensión del actual ayuntamiento hacerlo en un “bien de dominio público”.
¿Se aplicará también a los limpia parabrisas, tragafuegos y vende chácharas, que abundan en nuestras calles y a todos los vendedores ambulantes que ocupan calles y banquetas de nuestra ciudad? ¿A los mismos comerciantes establecidos que sacan sus productos a las banquetas, frente a sus locales? ¿A los innumerables talleres que prestan sus servicios en banquetas y calles?
¿Desalojará al expendio de copias fotostáticas que funciona en la explanada del palacio municipal, de estilo antiestético, de lámina y del mismo modelo que negó en el parque, porque aunque no lo quiera ver el presidente Torres García, está ocupando un “bien de dominio público”?
¿Por dónde empezará el alcalde Leopoldo Torres García?
No cabe duda… La Ley del Embudo, en todo su apogeo.

Estanquillo ubicado en Madero e Ignacio de la Llave

Estanquillo ubicado en Madero e Hidalgo

Estanquillo ubicado en Madero y Allende

Estanquillo ubicado en Madero e Iturbide

Leopoldo Torres García aplica la “Ley del embudo”