MINATITLÁN: La doctora Ann Ciphers imparte conferencia “Retos y Riesgos en la Vida Olmeca”
+Un valioso equipo de investigadores donde se conjugan la experiencia y la juventud, junto con la riqueza en conocimientos, involucrados en el Proyecto Antropológico Tenochtitlán.
Zona Sur
Humberto Arias.- - 2014-11-19
La cultura Olmeca vivió dos grandes crisis, la Canícula y la Gran Inundación, es la esencia después de 25 años de investigación del último libro publicado por los investigadores llamado “Retos y Riesgos en la Vida Olmeca” ganador del premio “Alfonso Caso” en el INHA como la mejor investigación en arqueología.
La doctora Ann Ciphers, del Instituto de Investigaciones de la UNAM y del Proyecto Antropológico “Tenochtitlán” iniciado en 1990, comenta a éste medio informativo que se impartiría un ciclo de conferencias durante ésta semana en las Escuelas Secundarias Técnicas, pero debido a la suspensión de clases, se abrió la exposición al público en general.
Acompañada con un joven, pero excelente equipo de investigadores en diferentes especialidades del Proyecto Olmeca, de manera emocionada explica que “la investigación a largo plazo ha dado excelentes resultados en diferentes aspectos, como en el laboratorio de química y los artefactos que se han encontrado, que nos permiten conocer más acerca de la vida de los Olmecas”.
El último libro, porque en cada año de la investigación han escrito uno, se contó con la colaboración de la maestra Judith Zurita y la doctora Maryleing Rodríguez, en su esencia le gustará a la gente de la zona sur de Veracruz, porque en él se plasma la subsistencia de los Olmecas y como manejaban las crisis.
Ellos sabían que en ciertas épocas del año, como en la actualidad, se vivía la Canícula y la Gran Inundación, donde se presentaban enfermedades y hambre por la falta de alimentos.
Por lo que se llegó a la conclusión de que los Olmecas, su alimentación básica consistía en vernáculos combinados con ricos alimentos acuáticos, como el pescado, la tortuga y otras especies. Para éste pueblo, el principal alimento no era el maíz como siempre se había pensado.
Ellos aprendieron a conservar estos alimentos, dando lugar al pescado ahumado, especie que hasta los tiempos actuales es un rico platillo en la región.
La Gran Inundación, como ellos le llamaban, era una crisis por la fuerza destructiva de la naturaleza, pero después era benéfica, pero al bajar la inundación, había mayor cantidad de alimentos, ya que muchas especies quedaban atrapadas en el entorno acuático natural de la región.
En San Lorenzo Tenochtitlán, creíamos dice la investigadora, que el alimento básico era el maíz, pero de acuerdo a las investigaciones, éste pueblo empezó a formarse en 1800 AC y desarrollarse hasta 1200 AC, donde encontramos mayor evidencia de vernáculos y de polen. Los hallazgos que se conocen ahora, es que el maíz empezó después del año 1200 AC.
Por lo tanto, el maíz no era el alimento básico del pueblo Olmeca, quizás su siembra se utilizó para hacer bebidas ceremoniales, quizás alcohólicas. No tenemos hallazgos de herramientas para hacer tortillas en el desarrollo del pueblo Olmeca, a excepción del metate, pero ese se utilizaba para moler cualquier alimento.
El pueblo Olmeca no se asentó en las orillas del río, porque comprendieron la fuerza destructiva de la naturaleza de la “Gran Inundación”, sin embargo, formaban pequeñas islitas que utilizaban para refugiarse y poder realizar mejor su actividad de la pesca, comenta la doctora Ann Cyphers.