Un fuerte enfrentamiento a balazos, en el que incluso participaron aeronaves artilladas de la Secretaría de Marina Armada de México, se registró la mañana de este jueves en los límites de Veracruz y Tabasco, en la zona de La Venta, ante la presencia de un grupo criminal con vínculos en el huachicol y la droga.
Esta célula, perteneciente a la delincuencia organizada, según el boletín de la 30 Zona Militar, de la Secretaría de la Defensa Nacional, portaba armas de grueso calibre y mantenían el control de esa región.
Los marinos apoyaban en labores de seguridad y vigilancia a la policía municipal de la Villa La Venta, Tabasco, cuando ocurrió el choque con el grupo de criminales que fuertemente armados, circulaban en el tramo carretero Cárdenas-Coatzacoalcos, a la altura de la ranchería Palo Mulato.
Durante la balacera, cayeron heridos de bala dos presuntos delincuentes, y en su escape, los demás integrantes de la célula criminal, dejaron abandonadas cinco unidades motrices, armamentos y radios de comunicación portátil. Presuntamente, se trata de miembros de un cártel que controlan parte de Tabasco y Veracruz en el huachicol y la droga.
Los asegurados fueron identificados como Luis David Mendoza Sánchez y Carlos Ignacio González Córdova, quienes fueron trasladados por los navales a un centro hospitalario donde se reportó que estaban estables, hecho por el que en breve serían entregados ante la autoridad de competencia.
El “encontronazo” de las fuerzas del orden con los criminales organizados, presuntamente, “huachicoleros”, se dio en la comunidad Palo Mulato, generando el inicial enfrentamiento a balazos, mismo que hizo se generara la persecución de los criminales que llegaron hasta la ranchería Pejelagartero en su segunda sección, y se adentraran a una propiedad particular conocida como “Rancho Los Gavilanes”.
En la zona, los delincuentes abandonaron cinco vehículos que correspondieron a cuatro camionetas y un auto compacto. Trascendió que hubieron otros detenidos a quiénes rápidamente se les trasladó a centros de operaciones de las fuerzas castrenses en donde se les mantiene bajo interrogatorios; se incautó en el lugar las unidad en las que en su interior se encontraron armas de fuego, tanto largas como cortas.
En el procedimiento, el personal de la Marina contabilizó el total de 11 armas largas, otras 8 cortas; seis radios de comunicación y las cinco unidades aseguradas. También había accesorios presuntamente con las iniciales CJNG.
Las investigaciones en torno a los hechos se están realizando y los operativos en la zona se mantienen tras el arribo de fuerzas de apoyo a la zona ante el ataque que tuvieron los Marinos y la policías.
