Le reprochan deportaciones; no quieren más discursos
Internacionales
- 2011-07-26
En su intento por reconectar con los latinos de cara a los comicios presidenciales de 2012, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se enfrentó ayer al ambiente de frustración y decepción de quienes le han exigido poner un alto a la campaña de deportaciones y cumplir con la palabra empeñada durante su campaña a la presidencia, cuando se comprometió hacer realidad una reforma migratoria justa y amplia.
Al participar en la conferencia anual del Consejo Nacional de La Raza (NCLR), la principal organización hispana defensora de los derechos civiles, el presidente Obama fue interrumpido por un grupo de jóvenes estudiantes que portaban camisetas con la leyenda:
“Obama Deports DREAMERS” (Obama deporta soladores, o estudiantes hijos de indocumentados que luchan a favor de su legalización).
“Nos pusimos de pie mientras el presidente Obama daba otro de sus discursos predecibles sobre inmigración, porque nos sentimos indignados de que aproveche este tipo de actos para promover su candidatura entre los latinos, mientras (su gobierno) continúa deportándonos”, aseguró Felipe Matos, un estudiante indocumentado que viajó desde Florida para estar presente en este acto de la NCLR.
“El hecho es que Obama ha deportado a más de un millón de inmigrantes, incluidos algunos dreamers desde que llegó a la Casa Blanca. Por eso es inconcebible que siga con sus discursos políticos para ganar el voto latino en 2012, mientras divide a la comunidad con sus inhumanas políticas de inmigración”, añadió Matos
Obama fue interrumpido cuando intentaba justificar su negativa a emprender una acción unilateral para poner fin a las redadas o impulsar una reforma.
“Sé que hay gente que quiere que me salte al Congreso y modifique las leyes. Créanme que la idea es muy tentadora, pero esa no es la forma en que funciona nuestra democracia”, dijo el mandatario , al tiempo que el coro de jóvenes le gritaban desde las gradas: “¡Sí, tú puedes; sí, tú puedes; sí, tú puedes!”.
“Créanme para esto necesito un compañero de baile”, insistió Obama en alusión a la falta de consensos en el Congreso para impulsar una reforma que hoy sigue en el limbo, tras haber fracasado el último de los intentos hace cinco años.
Nada más conocer los detalles de este incidente, el senador demócrata por Nueva Jersey, Bob Menéndez, se declaró de acuerdo con los miembros de la audiencia que alzaron su voz para decir “Sí puedes”.
En tanto, el gobernador del estado de California, Jerry Brown, promulgó ayer una ley que permitirá a los inmigrantes indocumentados recibir becas con financiamiento privado para asistir a universidades públicas.
La norma, llamada la Ley del sueño californiano, fue aprobada por la legislatura estatal más temprano este mismo mes y busca ayudar a los inmigrantes ilegales que han obtenido diplomas de secundaria tras cursar al menos tres años en el sistema de educación del estado.
La propuesta beneficiará solamente a aquellos inmigrantes que pueden matricularse como estudiantes residentes del estado, o bien que sean graduados que han cursado al menos tres años de secundaria o en escuelas alternativas en el estado de California.