MADRID: Lamenta el Papa eclipse de Dios en España

El papa Benedicto XVI vivió ayer su segundo día en España, donde preside la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), con una jornada muy intensa.

Por la mañana visitó a la familia real en el Palacio de la Zarzuela, y luego acudió al histórico Monasterio de El Escorial, construido entre los años 1563 y 1586, durante el reinado de Felipe II, donde se reunió con mil 600 religiosas jóvenes, a quienes alabó su dedicación a Dios. En este misma localidad de la Sierra del Guadarrama mantuvo un encuentro con profesores universitarios, ante quienes afirmó que en España se ha producido “un eclipse de Dios, una cierta amnesia; más aún, un verdadero rechazo del cristianismo”, en clara alusión al descenso del número de católicos entre la población de este país en los últimos años.

Pero no fue sólo con ellos con quien mostró una de sus constantes preocupaciones. Por la tarde mantuvo un encuentro con el presidente del gobierno español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, agnóstico confeso, a quien mostró su desasosiego por el giro laicista de su gobierno, con la aprobación de leyes como la del matrimonio entre personas del mismo sexo, la ampliación de la ley del aborto y la investigación con células madre.

Mientras durante todo el día miles de jóvenes procedentes de los cinco continentes le aclamaban allí por donde pasaba, los medios de comunicación españoles hacían público que varias organizaciones de feministas y de homosexuales presentaron el pasado día 11 una denuncia contra él, y solicitaban su detención e ingreso en prisión sin derecho a fianza por el “encubrimiento de pederastas de forma sistemática y organizada”.

La denuncia alude a los casos de pederastia ocurridos en el seno de la Iglesia católica y recuerda que “no existe inmunidad de los jefes de Estado sobre actos que representen crímenes de lesa humanidad”. Indica que “cualquier tribunal puede ejercer la jurisdicción universal” sobre delitos como “los actos generalizados de tortura, abusos sexuales y encubrimiento de los mismos, apología de la misoginia y la homofobia y persecución por motivos políticos, étnicos, de género o de orientación sexual”.

Según fuentes del Palacio de la Moncloa, la reunión entre Rodríguez Zapatero y el Papa duró media hora, asistió el ministro de la Presidencia, Fernando Jáuregui, y se celebró en la sede de la Nunciatura en Madrid.

Durante la misma se abordó la situación económica en Europa y el presidente español mostró el compromiso de su país de aplicar con eficacia las medidas de ajuste adoptadas, así como de trabajar por una mayor gobernanza económica europea y reforzar la coordinación internacional. También platicaron sobre la dramática situación humanitaria en el Cuerno de África, en particular a la malnutrición infantil en países como Somalia.

Hicieron un llamamiento a la comunidad internacional para que haga llegar cuanto antes la ayuda necesaria, así como a las autoridades responsables para que faciliten la distribución de dicha ayuda. Analizaron las revueltas en el mundo árabe, la situación en Medio Oriente y el reciente atentado del terrorista ultraderechista Anders Behring Breivik en Oslo, Noruega, que acabó con la vida de 76 jóvenes del Partido Laborista, sobre el que coincidieron en mostrar su preocupación ante el ascenso de la xenofobia en Europa.

La jornada de ayer culminó con la asistencia del Papa al Vía Crucis que se celebró en pleno centro de Madrid y que revivió el camino de Cristo hacia la crucifixión, con 15 pasos de 12 ciudades y algunas de las tallas de Semana Santa de mayor valor religioso y artístico de España.