El Presidente de EU aseguró que son señales de un crecimiento lento, pero constante del empleo, y el republicano calificó el aumento en la tasa de desocupación como un golpe a la clase media
Internacionales
Excelsior - 2012-08-04
En busca de una ventaja electoral, el presidente estadunidense, Barack Obama, y su rival republicano Mitt Romney interpretaron las cifras del mercado laboral dadas a conocer ayer de maneras totalmente diferentes.
Ambos candidatos intentaron ganar puntos políticos después de que el Departamento de Trabajo informó que la economía agregó 163 mil empleos en julio, el mejor ritmo de contratación en cinco meses. Sin embargo, la tasa de desempleo aumentó de 8.2% en junio a 8.3%.
Obama acogió las cifras como las señales más recientes de un crecimiento lento pero constante del empleo, mientras que Romney calificó el aumento en la tasa de desempleo como un duro golpe para las familias de clase media.
De acuerdo con especialistas, las perspectivas electorales de Obama en noviembre dependerán en gran parte de convencer a los estadunidenses de que él ha encaminado a la economía hacia el crecimiento.
“Todavía tenemos demasiada gente por ahí en busca de trabajo”, aseveró durante un acto en la Casa Blanca. “Tenemos más trabajo por hacer en su nombre.”
“Hemos creado en los últimos 29 meses más de 4.5 millones de empleos”, indicó el mandatario estadunidense.
El sector privado añadió en julio cerca de 172 mil empleos, mientas que el sector gubernamental perdió nueve mil. En total se generaron 163 mil nuevos trabajos, por encima de lo esperado por los analistas que vaticinaban la generación de 100 mil puestos.
El índice de desempleo ha estado por encima de ocho por ciento en Estados Unidos durante más de 42 meses.
Por su parte, el republicano Mitt Romney señaló que el aumento del desempleo perjudicará directamente a las familias afectadas por la recesión.
“El aumento de la tasa de desempleo hoy es un golpe de martillo para las familias de la clase media que tienen dificultades”, aseguró el republicano.
“El presidente Obama no tiene proyecto y cree que el sector privado ‘va bien’. Claramente, no es el caso”, manifestó Romney.
El Departamento del Trabajo informó que las solicitudes semanales de ayuda por desempleo subieron en ocho mil personas la semana pasada, a pesar de que la tasa nacional de desempleo se mantuvo sin cambios en junio.
El presidente del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, Alan Krueger, señaló que “todavía queda mucho trabajo por hacer”, pero que el informe sobre el empleo prueba que la economía estadunidense continúa en recuperación.
Ningún presidente estadunidense desde la II Guerra Mundial ha sido reelegido con un desempleo por encima de 8%.
“Es muy importante que continuemos las políticas que construyen una economía que funcione para la clase media mientras salimos del profundo agujero que fue causado por la severa recesión que comenzó en diciembre de 2007”, aseveró Krueger.
Sin embargo, los analistas consideran estas tasas de crecimiento como insuficientes para recuperar los millones de empleos destruidos como consecuencia de la crisis financiera de 2008.
Mismo equipo de 2008 lo respalda
El equipo del presidente estadunidense, Barack Obama, se ha caracterizado por difundir la continuidad y la cohesión y está formado por amigos y asesores que lo conocen desde que empezó su carrera política como senador estatal de Illinois en 1997 y con el que busca repetir la victoria de 2008.
A pesar de las críticas, tensiones y desacuerdos en los que se ha visto inmiscuido, Obama se ha mantenido leal a su círculo más cercano de asesores, algunos ahora en cargos distintos a los de hace cuatro años y que han estado a su lado en decisiones controvertidas como la reforma que establece el seguro médico obligatorio o la autorización de la operación que acabó con Osama bin Laden.
De los tres confidentes políticos más íntimos de Obama —Robert Gibbs, David Axelrod y Rahm Emanuel— y que influyeron de forma decisiva en la primera mitad de su mandato, solamente el último, actual alcalde de Chicago, está al margen de la campaña para las elecciones presidenciales del 6 de noviembre.
Gibbs dejó el cargo de portavoz de la Casa Blanca en enero de 2011, pero continúa trabajando como asesor externo para Obama.
Trabaja con Obama desde que éste se postuló para un escaño en el Senado en 2004, fue su director de comunicaciones durante su permanencia en la Cámara alta y después su portavoz en la campaña de 2008.
En cuanto a Axelrod, el principal estratega político del Presidente, regresó a Chicago hace año y medio para diseñar la estrategia para lograr la reelección.
Axelrod fue reportero de temas políticos para The Chicago Tribune, conoce al mandatario desde principios de los 90 y fue uno de los ideólogos de los mensajes de esperanza y cambio que desataron la “Obamanía” en 2008 tanto en EU como en el exterior.
David Plouffe, que fue director de la campaña de Obama en 2008, es ahora uno de los principales asesores políticos en la Casa Blanca. Su número dos hace cuatros años, Jim Messina, está al frente.
Entre las mujeres que forman parte del círculo más cercano al matrimonio presidencial destaca la asesora Valerie Jarrett, amiga desde hace años de los Obama.
También Stephanie Cutter, jefa de gabinete de Michelle Obama en 2008, portavoz del equipo de transición que preparó el desembarco en la Casa Blanca y ahora estratega de campaña con gran protagonismo en la televisión, entre otros.