En Amatlán cae mujer a pozo con agua

Una mujer de 44 años cayó a un pozo de aproximadamente 8 metros de profundidad, donde tras sumergirse flotó y logró sostenerse, hasta que fue rescatada por familiares y vecinos que se percataron del accidente, en calles de la unidad habitacional Erasmo Castellanos Quinto, de Amatlán.

Se trata de Lourdes Dorantes Díaz, de 44 años, con domicilio en la calle retorno Tamaulipas, número 5, de la referida unidad habitacional, ubicada en la zona de Peñuela.

Informes consultados señalan que alrededor de las 16:00 horas de ayer, el ama de casa se encontraba lavando ropa en el traspatio de su vivienda, pero al tratar de sacar agua de un pozo, se recargó en una viga podrida, que servía de soporte para maniobrar y jalar la cuerda con la cubeta.

Presuntamente por el peso de la señora, el madero se quebró y ella se fue al pozo, de aproximadamente 8 metros de profundidad.

Por fortuna, tras de sumergirse en el agua, la mujer salió a la superficie, gracias a que flotó, y luego hizo un compás con sus piernas para detenerse, permaneciendo así hasta que llegaron sus familiares, entre ellos su hermano Miguel, también de 44 años, y otras 4 mujeres, vecinas de la familia, quienes llegaron alarmadas al escuchar los gritos.

Asimismo, al ser solicitado auxilio al sistema de emergencias 066, al lugar arribaron policías y personal de Protección Civil del municipio de Amatlán, estos últimos al mando del profesor José de la Rosa Arragán.

De igual forma, se presentaron paramédicos de la Cruz Roja, quienes le brindaron los primeros auxilios al ama de casa, ya que presentaba crisis nerviosa, y la sometieron a interrogatorios, para comprobar que estaba coherente, y no había perdido el conocimiento.

Sin embargo, la mujer, ya un poco más tranquila, decidió que no fuera llevada al hospital y permaneció sentada en una cama, donde explicó que “yo estaba lavando la ropa, pero de momento me caí en el pozo, sentí que me sumí, pero lo que me ayudó es que yo sola volví a flotar y luego me detuve con los pies”.

Los rescatistas y familiares de la mujer inspeccionaron el pozo, mismo que no cuenta con brocal, y verificaron las condiciones de riesgo sobre todo para los menores. Asimismo, por tratarse de una familia de escasos recursos, solicitaron la intervención de las autoridades municipales, para la construcción de un brocal y así evitar futuros accidentes.