Timoshenko se declara en huelga de hambre por supuesto fraude electoral

La encarcelada ex primera ministra de Ucrania, Yulia Timoshenko, se declaró hoy en huelga de hambre en protesta por lo que ella llama fraude en las elecciones legislativas del domingo, ganadas por el partido gobernante.

“Me declaro en huelga de hambre en señal de protesta por la falsificación de las elecciones”, dijo Timoshenko, citada por su abogado Serguei Vlasenko.

La ex primera ministra ucraniana ha dejado de comer y sólo se limitará a beber agua, precisó su abogado a la salida del hospital de Jarkiv (este), donde Timoshenko recibe tratamiento por una hernia discal.

Timoshenko, quien cumple una cadena de siete años de prisión por abuso de poder, calificó los comicios del domingo como los más deshonestos en la historia de Ucrania, porque las elecciones fueron manipuladas desde el primero hasta el último día de la campaña proselitista.

La ex primera ministra aseguró que si ella estuviera libre, habría llamado a los ucranianos a las calles para realizar protestas como las de la llamada “Revolución Naranja” de 2004.

“Pero la única cosa que puedo hacer en estas circunstancias es declarar una huelga de hambre”, dijo Timoshenko, quien indicó que el régimen del presidente Victor Yanukovich ha perdido toda legitimidad.

La dirigente opositora, quien ya estuvo en huelga de hambre durante varias semanas en abril pasado tras ser traslada a fuerza a una clínica, insistió en que “las elecciones no pueden ser reconocidas como legítimas”, según la agencia rusa de noticias Novosti.

La oposición ucraniana denunció la víspera numerosas irregularidades durante los comicios, que fueron calificados como un “paso atrás” por la misión internacional de observadores de la Organización para la Seguridad y Cooperación Europea (OSCE).

En su informe, la OSCE denunció el abuso del recurso administrativo, la falta de transparencia de la campaña y de la formalización del escrutinio y el hecho de que el dinero jugara un papel preponderante durante las elecciones.

Según la Comisión Electoral Central (CEC), el gobernante Partido de las Regiones (PR), liderado por el presidente Yanukovich, encabeza los resultados de los comicios al obtener el 33.86 por ciento de los votos, con el 65.2 por ciento de los sufragios escrutados.

Los comunistas, sus aliados naturales, alcanzaron un resultado histórico por encima del 14 por ciento, por lo que convierten en la tercera fuerza más votada y en la llave de la gobernabilidad del país.

De esta manera, ambos partidos rondarían el 50 por ciento de votos necesarios para forjar una mayoría en la Rada Suprema (Legislativo).

En segundo sitio se ubica el partido de Timoshenko, Batkivschyna (Patria) con el 23 por ciento de los votos, por encima de lo pronosticado en las encuestas.