Un artero y sangriento crimen se dio en la comunidad de Miguel Hidalgo en el municipio de Jalacingo, donde un trabajador del volante le fue arrebatada la vida, todo pareciendo ser un crimen pasional al haber sido castrado.
Fue reportado después de las dos de la tarde que una vecina de la localidad de Miguel Hidalgo, al encontrarse pastoreando a sus animales se percato de una terrible escena, al ver el cuerpo de una persona al interior de la cajuela de un taxi.
Tras este macabro hecho, esta persona dio parte a la policía municipal, esto sin proporcionar sus generales por temor a represalias, teniendo que trasladarse de manera inmediata al lugar donde se encontraba el cuerpo.
Lo que origino un fuerte operativo por parte de municipales, estatales, AVI y personal del ministerio publico investigador para iniciar las primeras pesquisas en torno al sangriento hecho que enluteciera al gremio de taxistas.
Tras datos de corporaciones policiacas, el vehículo en el que viaja era un Tsuru color oficial numero económico 10, con placas de circulación 12-09-XCV, el cual era conducido por Guadalupe Pérez Rosas de 35 años y con domicilio en Jalacingo, Veracruz.
Se logro saber que este hecho aparentemente es pasional, debido a que al parecer sostenía una relación extramarital, aunado a que la noche anterior al artero crimen había andado tomando con algunas personas, por lo que elementos de la AVI realizaran las investigaciones correspondientes.
Mientras que el cuerpo del occiso tuvo que ser trasladado al semefo de la ciudad de Altotonga, por el personal de servicios periciales de la ciudad de Martínez de la Torre, para practicarle la necropsia de rigor para determinar la causa de la muerte.