+ El regreso de la Fórmula Uno al Autódromo Hermanos Rodríguez apunta a la campaña 2015; para concretarse, el circuito tendrá que ser ampliamente remodelado; este día, autoridades federales y locales darán una conferencia
Deportes
MILENIO - 2014-07-23
Después del primer aviso, ahora el año del regreso de una carrera de Fórmula Uno a México apunta a 2015. El que la categoría reina esté ausente desde 1992 y que regrese involucra una infraestructura y logística muy costosas, además de una planeación que raya en lo obsesivo, aunque la derrama económica suele ser monstruosa cuando hay una afición ávida del espectáculo del Gran Circo.
Ayer se informó que la Fórmula Uno planea volver a México tras poco más de dos décadas desde la última ocasión que el país fue parte del serial, y hoy el gobierno federal, con la presencia del jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, y la secretaria de Turismo, Claudia Ruiz Massieu, darán una conferencia.
Las carreras de Fórmula Uno se convierten en asunto de Estado en muchos países, ya que en algunos casos los gobiernos han tenido que aportar altas sumas para su realización, como en el caso de Canadá y Australia, y en realidad la mayoría de los circuitos europeos.
El Autódromo Hermanos Rodríguez se ha mencionado desde hace tres años para volver a ser pista F-1 pero tendría que remodelarse para alcanzar los altos estándares de la FIA.
De hecho, la noticia de que el GP de México podría estar en el calendario de 2014 se dio desde finales del año pasado, pero las adecuaciones del autódromo, que no dejarían la pista lista para que el evento se realizara en el presente calendario, truncaron el sueño de volver a oler el neumático quemado en el asfalto capitalino.
El plan de renovación fue diseñado desde 2011 y en ese entonces se presentaba con un costo estimado en los 50 millones de dólares en trabajos, además del reglamentario contrato, con Bernie Ecclestone, el patrón y administrador del serial, acuerdo que no puede ser por menos de cinco años con un costo promedio de 30 a 40 millones de dólares anuales.
Según información publicada por la revista Forbes en 2013, la inversión para albergar un Gran Premio de México oscilaba entre 40 y 55 millones de dólares al año en un plazo que puede ir desde los cuatro años obligatorios, además de extenderle un cheque por 200 millones más a Ecclestone.
El dinero es fundamental en F-1, pues Ecclestone ha sacado del tour a fechas históricas como Canadá o Francia por la falta de un acuerdo económico y la misma Fórmula Uno tiene un nivel de tarifas en las que tiene privilegios para los eventos más emblemáticos.
HISTORIA CONOCIDA
El 16 de noviembre de 2013 se reportó que el plan de 22 fechas en 2014 se había desmoronado, y la F-1 solo dejó las de Rusia y Austria en el itinerario del serial automovilístico, debido a que la lentitud de las remodelaciones no dejarían terminar a tiempo y no se podría incluir a México en la penúltima fecha del calendario que había sido presentado de forma provisional en septiembre. La intención manejada en aquel entonces era que 100 mil personas pudieran presenciar el evento.
Hermann Tilke, responsable de la construcción de las últimas pistas de Fórmula Uno, recibió el encargo de encabezar las modificaciones a la pista de la Magdalena Mixhuca, visitó el trazado y la expectativa llegó a tal nivel que Ecclestone incluyó a nuestro país en la lista provisional de grandes premios para 2014.
El deseo de Bernie de tener 22 carreras en un año luego sufrió un golpe. El problema en parte era la nueva reglamentación técnica que entró en vigor este año con el objetivo de reducir costos, ya que es conocido que algunos equipos como Red Bull (con su tetra campeón Sebastian Vettel) y Ferrari (con el dos veces monarca Fernando Alonso) emplean hasta 80 profesionales por carrera y llegan a gastar hasta 300 millones de dólares por calendario.
"Tenemos a México a la vuelta de la esquina", dijo Ecclestone ayer a Forbes, y los miles de entusiastas del automovilismo en el país cruzan los dedos para que esta vez sea cierto.
A REMODELAR
Una de las remodelaciones más importantes que se habían discutido desde 2011 es la de extender el circuito así como sus zonas de seguridad a nuevos sectores de la zona ubicada en la Magdalena Mixhuca. El proyecto original pensado por Tilke contemplaba convertir el trazado de uno de 16 a 19 curvas, hoy se espera más información sobre si los planos originales del teutón siguen siendo el basamento de la nueva estructura del inmueble.
Además, una de las complicaciones más marcadas por el ingeniero germano es la curva peraltada, donde según sus diagramas debía trazarse una zona de escape, una dura labor debido al poco espacio con el que se cuenta por causa de la cercanía del Foro Sol. Tal mejora requiere de la extensión del circuito y por tanto de la participación en permisos del Gobierno de la Ciudad de México.
Por ello, se tiene planeado que el circuito ingrese a la zona de ese inmueble, para atravesarlo y retomar el trazado hacia la recta principal.
Otro requerimiento era una nueva zona de pits, fosos y construcciones adecuadas, así como una torre de control modernizada, todo para unas dos horas de automovilismo de elite al año.
Según el plan original, el trazado sería muy similar al circuito de Las Américas en Austin, Texas, el cual se construyó en nueve meses, por lo que la conferencia que dará hoy el gobierno federal puede esclarecer detalles sobre los tiempos y las prospectivas de los trabajos.
ANTECEDENTE MÁS CERCANO
Flavio Abed, entonces subsecretario de Turismo del Distrito Federal, fue gestor de las fechas de Indy Car en el Autódromo Hermanos Rodríguez y de la exhibición de dos unidades del constructor Renault en el Paseo de la Reforma en 2007. El 14 de octubre de ese año los pilotos Nelson Piquet junior, de Brasil, y el italiano Giancarlo Fisichella, se encargaron de mostrar las bondades del monoplaza en la emblemática avenida de la Ciudad de México.