Como cada año, mucha gente se dispone en nuestro país a celebrar la fiesta de Halloween o “Noche de Brujas”, con disfraces tenebrosos para chicos y grandes, y donde los pequeños salen a las calles a pedir dulces y obsequios. Pero, ¿cuál es el oscuro origen de esta “fiesta”?. Respondiendo a la petición de nuestros lectores, les presentamos la versión 2014 de dicho origen, donde aproximadamente 300 años antes del nacimiento de Cristo, los Celtas vivieron en las Islas Británicas, Escandinavia, y Europa Occidental, cuyos usos y costumbres fueron controlados por una sociedad de sacerdotes llamada los druidas. Ellos adoraban y servían a Samhain, dios de la muerte.
Así, cada 31 de octubre, celebraban la víspera del año nuevo céltico y llevaban con ellos un nabo grande, el cual habían ahuecado en el interior con una cara tallada en el frente para representar el espíritu del que recibían su poder y conocimiento, el cual hoy es sustituido por una calabaza desde su llegada de esta tradición a los Estados Unidos en lo siglos 18 y 19. Desde entonces a esta figura tan representativa del Halloween se le llamó "Jack, el que vive en la linterna" y después vino a ser "Jack-O-Lantern" o La Linterna de Jack.
Sin embargo, se ha descubierto que en la actualidad esta fiesta es celebrada oficialmente por los satanistas, ocultistas, y adoradores del diablo como la víspera del año nuevo de la brujería. El mismo Antón Lavey, autor de la "biblia satánica" y sacerdote alto de la iglesia de satán, dice que hay 3 días sumamente importantes para todo satanista y el día más importante de todos es Halloween. La iglesia satánica asume como suya esta fiesta.
Desde el 5 de septiembre hasta el 9 de noviembre la iglesia satánica cumple las siguientes celebraciones, que se mezclan y aplican a los festejos del Halloween y día de muertos: Ayunan para buscar la voluntad de satanás; ritual para maldecir el cuerpo de Cristo; reflexión, disciplina, ayunos y mantras; maldicen a los integrantes de los grupos musicales y de artistas; ordenan a los ministros del rock, músicos, "managers", promotores, etc. involucrados en el satanismo; se bautizan con agua de alcantarilla, sangre de niños y de adultos sacrificados, entre otras prácticas.
El 31 de octubre, hacen la inscripción en el libro del macho cabrío, y comienza para ellos el año satánico; se invoca el poder total de Belcebú, Nostradamus y otros demonios. Es la víspera del Año Nuevo para la brujería. La enciclopedia del "Libro del mundo de lo oculto" dice que es el principio de todo lo "frío, oscuro y muerto". Cuando usted envía a sus niños a pedir trato/dulce o travesura, a pedir "calaverita" o Halloween, usted realmente les está enviando a festejar todo lo frío, oscuro, y muerto, en el mismo contexto satánico y oculto. Según la enciclopedia de Collier, "el tema de la celebración de las fiestas modernas de Halloween, viene de las viejas festividades druidas y los festivales romanos en el honor de Pomona, diosa de la fruta, que fueron llevados de la Gran Bretaña durante la ocupación romana”.
Los británicos trajeron a las iglesias católicas todas sus prácticas e ideas paganas incluyendo "el festival de Samhain". En el siglo IX, un Papa instituyó un nuevo día para ser celebrado por la iglesia el 1 de noviembre, llamándolo "Día de todos los Santos" (All Hallows Day). Este día celebraban a todos los mártires y santos de la iglesia católica y el 31 de octubre se convirtió en su víspera. Ahora la gente podría tener su festival el 31 de octubre, porque el 1 de noviembre era un día "santo".
La cultura popular llamó a la celebración el "All Hallomas" y con el paso del tiempo a la tarde anterior al 1 de noviembre se le conoció como "All Hallomas Eve", evolucionando poco a poco como "All Hallow's Eve" (Víspera de la santificación de todos), "All Hallowed Eve" (Todo santificado en la víspera), "All Hallow E'en" –evening- (Todo santificado en la noche de la víspera), y finalmente Halloween (o Hallowe’en, sustantivo en inglés que significa: Víspera de todos los santos).
Mucha gente piensa que esto es exagerado y ralla en el fanatismo religioso, sin embargo es la ignorancia del contexto en el que se originó esta tradición anglosajona lo que lleva celebrarla creyendo que no existe nada de malo en ello, cuando en realidad son participantes de lo que se denomina ocultismo. No hay nada de inocente en disfrazarse de brujas, diablos, fantasmas, calabazas, etc; ni tampoco de hacer dibujos alusivos, o poner adornos que tengan que ver con esa fiesta, pues de manera indirecta se está participando, imitando algo que solo traerá cosas negativas a quien los haga. La Biblia dice en Deuteronomio capítulo 18, verso 9: “Cuando hayas entrado en la tierra que tu Dios, te da, no imites las costumbres perversas de aquellos pueblos…”. Esta es la realidad del Halloween, pero la decisión final de creerlo o no es de cada quien.