+Pretendía ingresar a una de las habitaciones del motel conocido como “Secreteo”; al parecer de un infarto.
Policiaca
David Alavez Cabra - 2016-06-06
Una mujer que en vida respondió al nombre de María Soledad Quixtiano Jiménez, murió la madrugada de ayer domingo cuando pretendía ingresar a una de las habitaciones del motel conocido como “Secreteo”; al parecer de un infarto.
Los hechos ocurrieron durante las primeras horas de ayer cuando la dama, que contaba con 39 años y que era originaria del municipio de Tehuacán, Puebla, ingresaba muy alegre al motel ubicado en bulevar Institutos Tecnológicos, en la colonia Oaxaqueña, en compañía de una persona del sexo masculino.
Al caminar por las escalares rumbo a la habitación que les habían asignado, la infortunada mujer comenzó a sentirse mal de salud y desvaneció.
Uno de los empleados que se encontraba de turno inmediatamente comunicó los hechos a la recepcionista y pidieron el apoyo de paramédicos de la Cruz Roja local.
Desgraciadamente cuando los socorristas llegaron el cuerpo ya no tenía vida, por lo que fue necesaria la intervención de elementos de Servicios Periciales y de la Policía Ministerial (PM), quienes tomaron conocimiento del deceso de la dama cuyo cuerpo fue enviado al Servicio Médico Forense (Semefo) donde horas más tarde fue identificado y reclamado por familiares.
María Soledad Quixtiano, tuvo su domicilio en calle 25 B Sur número 58 esquina 23 Oriente, en Tehuacán, Puebla.
Cabe mencionar que hace poco más de un año, el 17 de marzo del 2015, en la habitación número 19 del mismo motel, una mujer identificada como Juana Torres Domínguez, de 27 años, fue encontrada casi muerta en el jacuzzi, con huellas claras de violencia y con un cable en el cuello por lo que fue auxiliada para ser llevada inconsciente al hospital. Nunca se supo si se trató de un intento de suicidio o de homicidio; curiosamente el hombre con el que entró, no apareció por ningún lado.