El choque de trenes que viene
Arturo Reyes Isidoro
Prosa Aprisa
2017-07-25
Luego de que termine esta semana y el resto del mes, en el Congreso local aumentará la temperatura, y no precisamente por la canícula, pero en una de esas, factores combinados pueden hacer que a más de uno le dé rabia y lo veamos echar espuma por la boca.
Desde el 11 de julio, cuando se votó la destitución del diputado Sergio Rodríguez Cortés como presidente de la Comisión Permanente de Hacienda, se vislumbró ya el choque de trenes que se habrá de dar en unos días más a causa del control de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) y con ello de las tres áreas claves: las que manejan las finanzas, las nóminas (administrativa) y la tesorería, así como de la mesa directiva.
Ése día fueron más los que se abstuvieron, 25 diputados (del PRI, Morena, Juntos por Veracruz y la panista María Josefina Gamboa Torales), contra los que votaron a favor de que le dieran “piso”, 23 (del PAN y del PRD), pero aquellos en cualquier momento tratarán de recuperar la posición para el “Checo” Rodríguez haciendo valer su mayoría.
Pero en todo caso eso será sólo para empezar a calentar el ambiente, porque lo que se sabe es que los panistas han cavado zanjas y se han atrincherado para tratar de no entregar la Jucopo ni la presidencia de la mesa directiva, las que por reglamento interno corresponderá encabezar a partir de septiembre a la bancada de Morena, la que a su vez deberá entregar a la del PRI en el último tramo, y Morena y el PRI están aliados ahora y jalando parejo, y con ellos los de Juntos por Veracruz.
No se ve cómo los panistas podrán negarse a actuar dentro de la legalidad, que si lo intentan entonces crearán un serio problema político interno y harán que los otros se radicalicen, como también crearán inestabilidad si se niegan a soltar las tres áreas clave, como pretenden ya en última instancia, o sea ceder la Jucopo pero no finanzas, nóminas ni la tesorería, o si se aferran a retener la presidencia de la mesa directiva.
Los morenos ya hace meses se han venido preparando para el manejo de la nueva responsabilidad y no se cree que nada más porque los panistas se opongan, porque sí van a renunciar a algo que por derecho les corresponde, además de que cuentan con el apoyo de las otras bancadas, pero de que los azules se aferran al control, se aferran.
En el futuro inmediato y mediato seguramente dos mujeres van a despuntar: la diputada panista Cinthya Lobato Calderón y la morena Daniela Griego Ceballos, quienes pugnarán por la transparencia (si regresa Eva Cadena se les unirá en esa lucha). Hasta ahora extraña que la priista Regina Vázquez Saut mantenga un perfil discreto y no se haya mostrado aguerrida.
Dentro de la bancada del PAN, Cinthya se mantendrá en su línea y no se someterá a ningún otro dictado del líder de su bancada Sergio Hernández. Persistirá en que haya un cambio de veras y que se informe el manejo y destino de los recursos y que se haga un buen uso de ellos. Algo destacable es que hasta ahora el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares no ha intentado frenarla y que la dirigencia de su partido la respeta y la apoya.
Hasta aquí la dejo. Sigo de vacaciones y me dije que no iba a publicar en estos días. El gusanito del periodismo es letal.