EL ALEJAMIENTO DE RENATO TRONCO
Columna sin nombre
Pablo Jair Ortega
www.columnasinnombre.com
pablojairortegadiaz@gmail.com
18 de MAYO de 2014
Pablo Jair Ortega
Columna sin nombre
2014-05-18
Renato Tronco Gómez, como era previsto, regresa a su curul en el Congreso del Estado para seguir disfrutando de las mieles del poder. Su “renuncia” era sólo un mal chiste; ni siquiera era digno de crédito el anuncio.
Un buen amigo preguntaba si había motivo alguno para que Renato Tronco se “rebelara” contra sus protectores: había en ese entonces señales como la de la Secretaría de Seguridad Pública desarticulando a su policía en Las Choapas, o la creación de cuerpos especiales de investigación para los casos de abigeato muy comunes en esa región.
En Xalapa lo único que saben es que Renato Tronco Gómez nunca fue abandonado; que, al contrario, se le ha apoyado en todas las peticiones y caprichos que solicita, pero el fondo real del distanciamiento fue el dinero que pide a carretonadas y que le dijeron que ya no era posible darle, dada la situación financiera.
Y es que Tronco estaba solicitando cantidades millonarias para la “operación” de la campaña de su hermano Miguel para la alcaldía de Las Choapas (en las campañas políticas es cuando surge más el dinero y más oportunidades se dan para darlo como “perdido”); y lo mismo sigue haciendo cuando gana el municipio o el distrito.
Lo ha hecho en múltiples ocasiones, pues cuando ha sido alcalde y diputado, sigue pidiendo dinero por montones. Renato tiene esa mala costumbre de exagerar con los montos que pide con el pretexto de que el progreso llegue a Las Choapas. Que pide cantidades a la par de municipios y distritos importantes como Coatzacoalcos o Veracruz.
Pero esta vez le dijeron que, con la pena, pero no hay dinero. Que pide mucho por la región que representa y no podían darle tanto.
Esto ocasionó que el actual diputado por el PVEM se distanciara del PRI (el verdadero partido que representa de facto en el Congreso) y se alejó de la cúpula por su propio pie, pues aunque saben la clase de malandro que es, lo consideran un activo valioso para el sistema.
En pocas palabras, Renato solito se fue abriendo del poder.
Otra de las necedades de Tronco Gómez es la insistencia en convertirse en candidato a diputado federal por Minatitlán en las próximas elecciones, pero sus intereses chocan con el de los petroleros, dueños del distrito 14 con cabecera en el pueblo petrolero.
Renato Tronco se ha movido en la amplia zona rural de este distrito; visita comunidades, hace “amarres”, se presenta ante los poblados como la opción para ya no depender del yugo del petrolerismo. Curiosamente, la población indígena siempre se ha rebelado, pero en época de elecciones su voto no inclina la balanza a favor de la oposición; podemos decir que siguen votando por el PRI.
Renato Tronco no visita la parte importante del distrito que es la mancha urbana de Minatitlán, donde se concentra la mayor parte de la población. Estamos hablando de que el sindicato petrolero, a través de su Sección 10, controla (a ojo de buen cubero) cerca de 50 mil votos duros.
Tampoco desde Xalapa, mucho menos del altiplano, le quitarían este coto de poder a los petroleros; el gobernador --en su calidad de primer priísta del estado-- no le entregaría a Tronco una posición que controla su amigo el dirigente nacional de los petroleros, Carlos Romero Deschamps, como tampoco lo haría el presidente nacional del partido, César Camacho, o de la república, Enrique Peña Nieto. Sencillamente, Tronco no puede competir contra los petroleros por más que patalee. No figura, no existe, y de diputado local o alcalde no va a pasar.
Renato se alejó del poder: nadie lo persiguió y mucho menos fue traicionado, como él dice. Fueron meros caprichos que no se le cumplieron como sí ocurrió en el pasado, pero que a estas alturas ya no le piensan alcahuetear.
Y con todo lo despotricado por Tronco no creemos que vuelvan a hacerle caso; sería realmente un suicidio volver a confiar en alguien de esa naturaleza. Los que piensan seguirle el juego, estarán pagando más caro el caldo que las albóndigas.
Incluso dicen que Marco Estrada Montiel, el ya virtual alcalde por Las Choapas, no está peleado con el PRI. Que en cualquier rato se afilia nuevamente a las filas del tricolor, donde tiene muy buenas relaciones.
Y aparte: no es tan caprichudo como Tronco y no se la jala pidiendo tanto dinero.
Veremos, dijo un ciego.
EPÍLOGO
Hay sectores dentro del Gobierno de Veracruz que parecen no entender el mensaje que se está suscitando a nivel nacional respecto a la lucha contra el narco. Nos referimos a la cancelación de conciertos donde contratan a grupos o bandas de música de narcocorridos como “Calibre 50” o “El Komander”, a los cuales en varias partes del país les han cancelado. En Coatepec, el alcalde Juanelo llevó a los “Calibre 50” a la feria del Pueblo Mágico (donde además cuentan que se llevó una rechifla de esas chidas, donde le gritaban “¡Pluto! ¡Pluto!” o algo así); no hace mucho, en la Secretaría de Turismo se vanagloriaron de que en Actopan terminaron las grabaciones de “El Señor de Los Cielos”, que retrata ni más ni menos que las hazañas de Amado Carrillo Fuentes. Total que mientras el discurso oficial habla precisamente del combate a los grupos delincuenciales, hay funcionarios que no parecen entender lo delicado de hacer apología de la violencia a través de eventos masivos. En Tuxpan, por ejemplo, no por nada cancelaron el concierto de “El Komander” la semana pasada… ¿O será por que este vato es de Sinaloa y allí la plaza es de otros? Sepa la bola.