AGUA DE CALABAZA

En realidad no sabemos una cifra exacta, pero podemos deducir que son muchos los municipios que en todo el estado de Veracruz carecen de una red de drenaje por una sencilla razón: es una obra pública que no reluce, no deslumbra, nunca se ve.

La mediocre idiosincrasia del político mexicano (con sus honrosas excepciones) y la falta de educación, cultura y visión de muchos ediles veracruzanos, es precisamente en este sentido; quieren obras por las cuales los recuerden: alumbrado público, parques, ornamentos a veces innecesarios, remodelaciones, pero sobre todo la pavimentación de calles sin tomar en cuenta si debajo de ese camino existe una red de drenaje para captar las aguas residuales.

Al no existir dicha red --nos comentan reconocidos biólogos veracruzanos-- estas aguas negras por lo regular van a fosas sépticas y de ahí se filtran al subsuelo, contaminando mantos freáticos que a veces alcanza de dotar del vital líquido no sólo a una pequeña comunidad, sino a varios municipios alrededor. De ahí, lógicamente, derivan los problemas de salud.

Pero el problema es que a veces ni siquiera existen la preocupación ni el razonamiento para entender que este grave problema no se resuelve con más anuncios demagógicos como la creación de plantas de tratamiento por una sencilla razón: no hay una red de drenaje que capte toda esa agua sucia para su reutilizamiento.

Aguas: ahora pregúntese usted si hay drenaje en su colonia.