Santuario de la candelaria en Tlacotalpan sede de reunión de sacerdotes y obispo de Veracruz

+Luis Felipe Gallardo Martin Del Campo obispo de Veracruz ofició misa en la parroquia de Nuestra señora de la Candelaria

Zona Sur

Pablo Solano Tejeda - 2013-08-06

El obispo de la diócesis de Veracruz, Luis Felipe Gallardo Martin Del Campo, se reunió con alrededor de 100 sacerdotes en la ciudad Patrimonio Cultural de la humanidad, Tlacotalpan, con motivo de la convivencia sacerdotal anual en honor a "San Juan María Vianney" el santo patrono de los sacerdotes, estando presente el alcalde Hilario Villegas Sosa.

El 4 de agosto se festeja a “San Juan María Vianney, por excelencia, el ejemplo de todo sacerdote, a quien el Santo Padre Benedicto XVI proclamó durante el Año Sacerdotal 2009-2010 "Santo patrono de los sacerdotes".

El convivio comenzó a las 10 de la mañana de éste lunes, con una misa en la parroquia de Nuestra Señora de la Candelaria, en donde el obispo en su mensaje a los sacerdotes ahí presentes, pidió seguir el ejemplo del papa Francisco, quien desde que asumió el camino de Dios, siempre se ha caracterizado por su humildad y su espíritu de servicio.

El obispo aseguró a los sacerdotes que junto con él “estamos unidos en la oración y en la caridad pastoral”.

En entrevista, el obispo Luis Felipe Gallardo, señaló que "Todos los sacerdotes tienen dos convivencias al año, una el 4 de agosto en el día de San Juan María Vianney santo Patrono de los sacerdotes y otra en diciembre. Pero como el día 4 cayó en domingo, por eso hicieron esta reunión en lunes. Vamos visitando parroquias cada año, dijo, y en esta ocasión le toco ser sede a Tlacotalpan, en donde el párroco Felipe Andrade Murillo fue anfitrión y nos ha atendido muy bien”.

“Lo que se trata es de hacer conciencia a todos los fieles es que hay cosas que nunca cambian, Dios es eterno y nunca cambiará. Estamos viviendo en una época en que la indiferencia religiosa parece que está ganando terreno, tal vez el avance de la ciencia y la tecnología pudiera parecer que ya no necesitamos de Dios y que todo lo podemos resolver, pero la realidad es que llega el momento de la muerte y cual resolver, precisamente en el plan de Dios está en darnos una vida plena y eterna”, finalizó el obispo.

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