+El denso color del denominado oro negro, no se compara con los falsos discursos de algunos grupos para lograr agitar las próximas elecciones del Sindicato Petrolero
Nacionales
REDACCIÓN - 2018-10-23
El denso color del denominado oro negro, no se compara con los falsos discursos y utopías de algunos grupos para lograr agitar las próximas elecciones del Sindicato Petrolero de PEMEX, buscando con ello, más que salvar su funcionamiento gremial, acabar de una vez con todas este derecho a la libertad de conformarlo.
Las recientes declaraciones de la futura titular de la Secretaría de Energía Rocío Nahle García, quien deslindó al gobierno electo de Andrés Manuel López Obrador y el partido morena de cualquier intromisión en este proceso de selección, no han sido suficientes para que este grupo de oportunistas sigan confundiendo a los trabajadores, utilizando supuestos recursos legales ante organismos defensores de las garantías laborales, como el Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La historia por el poder se repite, antes era luchar contra las empresas extranjeras y su sed para explotar a la base gremial; ahora es una banda de seudolibertadores, quienes escondidos en una siglas, intentan robar el real combustible de PEMEX, representado en cada uno de los sindicalizados.
Ninguna llama de la perversidad podrá acabar con la planeación y organización de un proceso sindical, ni podrá lograr confundir una voluntad de la mayoría de los petroleros que buscan que las viejas prácticas dejen de existir, para dar paso a una real transformación sindical.
Los circos de la ambición y la presión de estos payasos traicioneros de la Nación han llegado a su fin, sus actos para obligar a Deschamps no son suficientes. Es tiempo de la verdad y la justicia.