Viuda del periodista Gregorio Jiménez de la Cruz, denuncia amenazas

Carmela Hernández Osorio, viuda del periodista veracruzano Gregorio Jiménez de la Cruz, asesinado hace un año, denunció que en repetidas ocasiones ha sido víctima de amenazas por parte de personas desconocidas, por lo que solicitó a los gobiernos federal y estatal agilicen protocolos para protegerla a ella y a sus cuatro hijos.

En conferencia de prensa con representantes de organizaciones como la Casa de los Derechos de Periodistas, Reporteros sin Fronteras y Periodistas de Apie Hernández Osorio, manifestó que lo mismo la paran en la calle personas desconocidas o vigilan sus pasos.

Detalló que el gobierno estatal le ha brindado dos policías, pero de poco ha servido, pues éstos hasta hace una semana no contaban con automóvil.

Se quejó de que el gobernador de Veracruz Javier Duarte de Ochoa no ha cumplido con sus promesas, una fue de seguridad en su persona y para sus hijos, la otra eran becas para sus cuatro hijos, dos de ellos estudian la secundaria, mientras que los otros dos cursan el nivel medio superior.

Actualmente ella mantiene a su familia con lo que genera de la toma y venta de fotografías de eventos sociales como de 15 años, bautizos, primeras comuniones y graduaciones.

Por su parte Balbina Flores de Reporteros sin Fronteras, dijo que exigen a las autoridades que cumplan con el papel de proteger a las víctimas de las agresiones a quienes han ejercido la libertad de expresión.

Mientras que Víctor Ruiz Arrazola recordó que en la administración de Duarte se han registrado 11 asesinatos en contra de periodistas y ninguno se ha aclarado y exigió que la PGR atraiga los casos de comunicadores agredidos, pues en las entidades hay intereses políticos y por ello no se investiga.

En tanto que Daniela Pastrana de Periodistas de A Pie lamentó que el caso de Moisés Sánchez, asesinado el mes pasado en Veracruz sigue el mismo patrón que el de Gregorio, sin investigarse.

También dijo que es inaceptable que las autoridades le pasen la estafeta a las organizaciones civiles para que sean éstas quienes se encarguen de la seguridad, y no están haciendo lo que les corresponde.